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a Municipalidad de Paraná presentó un recurso de apelación en virtud del fallo de la Sala Segunda de la Cámara 3ª de Apelaciones de Paraná, quien emitió un fallo contra el Municipio, al reconocer la denuncia por supuesto desmonte del Parque Nuevo presentada por el Foro Ecologista local. “Hoy mismo nos notificamos de la sentencia y presentamos el recurso de apelación, pues creemos que hay argumentos en la contestación de demanda que están fundados en viejas y continuas jurisprudencia del Superior Tribunal de Justicia, las que no han sido debidamente tenidas en cuenta”, dijo el doctor Alejandro Cánepa, secretario Legal y Administrativo de la Comuna al momento de dar precisiones sobre la actuación municipal. Según el profesional de las leyes, el Municipio apela porque entiende que debe ser el STJ quien, “ratificando esta vieja jurisprudencia, esta vieja doctrina propia, termine haciendo lugar a nuestro planteo, revocando la sentencia de grado”, que es, en este caso, la sentencia de la Cámara. La argumentación tiene que ver con cuestiones formales de la presentación del amparo que, de acuerdo a la observación de Cánepa, “no sea han respetado”. “Tiene que ver con otros requisitos y condiciones que esta acción debe cumplir, debe mantener y vigilar, y no se han hecho; también con lo que ha sido el procedimiento en sí, incluso nosotros, en el mismo procedimiento, hemos planteado estas cuestiones al propio Tribunal para que las resuelva y no lo ha hecho en la forma en que su jurisprudencia venía resolviendo”, dio a conocer el funcionario, acotando que “hay también cuestiones de fondo que nosotros vamos a ratificar y reivindicar, que tiene que ver con de qué manera hemos tratado al Parque”. Cánepa dice que existe una zona que hace más de 10 años que está urbanizada, porque así ha sido el destino original de este espacio, y que todas las actividades tuvieron que ver con continuar con esa urbanización y además mejorarla. “Había lugares, como mencionamos en la contestación de la demanda, donde se descubrieron calles, bicisendas y miradores que habían quedado a las buenas de la naturaleza. La sentencia no pide ninguna restauración o reparación, así que van a terminar de parquizarse como están hasta que tengamos sentencia definitiva, dado que con la sentencia hay una definición en donde el Tribunal entiende que nosotros hemos incumplido el grado de protección que le brinda la ordenanza. Pero además el Tribunal entiende otra cuestión, que yo creo que es más importante todavía, que a nosotros nos va a obligar a plantear un debate serio respecto del destino del futuro del parque: que el grado de protección que esta ordenanza le da a este sitio es absolutamente incompatible con cualquier actividad humana, es decir que es absolutamente incompatible con cualquier cosa que se quiera desarrollar”, reflexionó en tono crítico Cánepa, observando que esta idea “previene entonces que este Parque como área natural se desarrolle de manera casi salvaje; de esta manera el debate que se nos avecina es qué destino daremos para el Parque Humberto Varisco, incluso el Tribunal pide una zonificación y hay un sector que se ve claramente que el destino es el disfrute por parte de la gente, lo que se ha visto a partir de los trabajos que realizamos, viéndose una mayor afluencia de público en ese lugar”. A modo de resumen de cara a lo que se viene a partir de este conflicto, Cánepa opinó que “este es el debate que se viene, independientemente del resultado del juicio, es decir, el destino del Parque, con 92 hectáreas para planificar. Y entendemos que no debe ser tan tajante esa definición de ser librado a la buena de la naturaleza o incluso de estar exceptuado de la actividad del hombre, de los ciudadanos que lo quieran disfrutar”, finalizó.