E
l tema podría plantearse como una disputa o enfrentamiento. Sin embargo, un par de reuniones en la que se consideró el sistema de fotomultas, con la participación de integrantes de la Cámara de Turismo de Entre Ríos –Cater- y de la Policía, parecen haber acercado las posiciones. La semana pasada, La Paz fue el lugar de realización de un nuevo encuentro, donde los empresarios fueron en busca de “soluciones al problema” de las fotomultas y operativos de seguridad. El Jefe de Prevención y Seguridad Vial, comisario Gustavo Maslein, habló de la decisión de “ir articulando” el trabajo y aseguró que “somos abiertos” para dialogar y “llegar a acuerdos con los distintos sectores” que se vinculan al transporte y traslado de las personas en las rutas y caminos de Entre Ríos. Unos y otros Cater en reiteradas ocasiones ha manifestado su acuerdo con un sistema de control y prevención porque reconoce “el valor de transitar seguros las rutas, situación que también reconocen los turistas”. No obstante, considera que “el sistema de fotomultas no previene” y que en muchos casos tiene “un fin recaudatorio”. El sector aludió a un incremento de los puntos de control, cuestionó la ubicación de los mismos y se hizo eco de mails y llamados que reciben de turistas que han pasado por el territorio provincial y se sienten “perjudicados, cuando no estafados” por el monto y la causa de las multas que reciben en sus domicilios luego de transitar nuestras rutas. Los planteos llegaron directamente al comisario Maslein en el encuentro de la semana pasada, realizado en La Paz, donde el tema dio lugar a una charla debate que el funcionario policial repasó con esta Hoja. El director de Seguridad Vial precisó que aún cuando los carteles en las rutas siguen indicando velocidad máxima 40 ó 60 kilómetros por hora, “el sistema se ha ido readecuando” de modo que las multas se cobran cuando el automovilista supera los 90Km/h en rutas urbanas (Ruta 14 en las zonas de Ceibas y Gualeguaychú, por ejemplo); 120 km/h en ruta abierta (tramo de autopista ruta 14) y 110Km/h en rutas internas. En el caso de camiones, 80Km/h, y de colectivos, 90 Km/h. Admitió que en la reunión, los empresarios le mostraron actas labradas por velocidades menores a las mencionadas pero “eran viejas, anteriores a que se produjeran las readecuaciones”, explicó. En ese orden, acotó que los cambios se fueron produciendo luego de un primer encuentro que mantuvo con la Cámara, por noviembre del año pasado. En cuanto a la localización, Maslein explicó que la ubicación de las cámaras se va rotando. “No están fijas sino que se van rotando en función de los lugares más críticos que surgen de un mapa estadístico de accidentes”, aseguró antes de atribuir a la existencia de estos controles la disminución de accidentes de tránsito. En este punto, comentó también que el exceso de velocidad y el adelantamiento indebido están entre las principales causas de accidentes en las rutas. El manejo de dinero en los puestos camineros también mereció algunas consideraciones. Maslein señaló que amparados en el decreto 1962 que reglamenta el artículo 85 de la ley de Tránsito, el personal policial está facultado para notificar al automovilista la infracción cometida, quien en el mismo momento puede abonarla. Otra alternativa es notificarlo y luego se le envía el acta para que vía depósito bancario, abone la multa. Los empresarios volvieron a señalar la dificultad e incluso el peligro que constituye que los controles se hagan sobre la ruta. “Este es un tema que ya está hablado para que los puestos se establezcan paralelos a la ruta e incluso para que en los controles se desvíe a los automóviles. Es decir, que no queden detenidos sobre la ruta sino a un costado y ahí se le requiera la documentación”, dijo Maslein como si se tratara de un tema resuelto pero que evidentemente sigue siendo materia de preocupación para los empresarios turísticos. “Somos abiertos” manifestó Maslein, con referencia a las reuniones que mantiene la Policía con distintos sectores –CATER, Cámara del Transporte de cargas, entre otros- “tratando de llegar a acuerdos”. Por otra parte, y a propósito de “ir articulando” acciones, adelantó la disposición para que personal de esa fuerza asista a un curso que brindaría la Cámara para entre otros aspectos, trasmitir la relevancia que la actividad turística tiene para la economía provincial y la incidencia que tiene el trato que se le brinda al visitante. (Fuente: El Diario)