M
arta Covella, la jueza de Paz de la ciudad de General Pico que tras la aprobación de la ley de matrimonio gay había adelantado que por cuestiones religiosas no casaría a personas del mismo sexo, cambió de opinión y este lunes ya atendió consultas de parejas homosexuales. Así lo confirmó la directora general del Registro de las Personas de La Pampa, Irene Giusti, quien informó que Covella “mantuvo una serie de encuentros con parejas del mismo sexo, a quienes asesoró respecto a los trámites necesarios para concretar el casamiento, una vez que esté promulgada la ley". La decisión de Covella habría sido tomada tras mantener “un diálogo con su pastor” sobre el tema y “a partir de ese momento encabezó ella misma los encuentros con las parejas que cuestionó", señaló Giusti. Días atrás ella misma había confirmado que la provincia de La Pampa garantizará el casamiento de parejas del mismo sexo, luego que la jueza de Paz de General Pico dijera que iba a rechazar los matrimonios igualitarios porque "Dios no lo aprueba". Según indicó, "la objeción de conciencia no es argumento válido para incumplir con la ley establecida". No obstante, aclaró que Covella no fue sancionada por realizó “manifestaciones personales”, pero subrayó que “en caso de negarse, llegado el momento la actitud sería plausible de sanciones". La jueza de Paz había asegurado que no aceptaría casar homosexuales por "una cuestión de principios cristianos" y porque "en la Biblia Dios no aprueba esa forma de vivir".