E
l próximo martes, un grupo de diez asambleístas será recibido en su despacho por el flamante canciller Héctor Timerman, quien oficializará el plan de monitoreo ambiental sobre el río Uruguay que presentó ante su par uruguayo, Luis Almagro. El encuentro con el Ministro de Relaciones Exteriores argentino fue pedido por la Asamblea Ambiental a través del gobernador, Sergio Urribarri, con el objetivo de conocer el pensamiento y la opinión del funcionario nacional respecto a la marcha del conflicto. Para la Asamblea, la audiencia del martes con Timerman es “un hecho muy importante porque hace tiempo que no teníamos una charla con la Cancillería”, señaló a Radio Cero el bioquímico Carlos Augusto Goldaracena, integrante del equipo técnico de la ONG ambiental y uno de los que asistirá a la reunión de la próxima semana. El profesional indicó que la Asamblea “siempre está dispuesta al diálogo y ese encuentro será muy importante para plantear algunas cosas” y remarcó que se debe insistir en dos puntos fundamentales: “que el Gobierno Nacional difunda los informes técnicos de La Haya ya que la población los conoce muy poco y pareciera que Argentina no presentó pruebas; y solicitar la difusión de los informes de La Haya desde el punto de vista jurídico y técnico”. Goldaracena señaló que “se ha demostrado la contaminación de la atmósfera en la zona ribereña de Gualeguaychú al encontrarse ácido sulfhídrico que no había antes de la instalación de Botnia, y hay alteraciones físicas, químicas y biológicas aunque no son continuas sino parciales, lo cual es un inicio de la contaminación”. El bioquímico insistió en que “debe haber un control de la planta y también uno exhaustivo del río y en la atmósfera circundante” y agregó que debe cumplirse con lo que pidió el Gobierno argentino, amparándose en el fallo de La Haya, que es “controlar la planta de Botnia desde adentro, el procedimiento de fabricación, los insumos utilizados, distintos anexos y además controlar los efluentes”. “Reclamo justo y legítimo” Por su parte, el abogado Luis Leissa, integrante del equipo legal de la Asamblea y que también asistirá a la reunión con Timerman el martes, explicó en diálogo con Radio Cero que a la audiencia “vamos a informarnos, porque es importante que tengamos información directa para poder aportar a la solución del conflicto”. “Que se entienda que el reclamo de Gualeguaychú es justo y legítimo” remarcó el letrado y señaló que “se deben poner todas las energías en el control de Botnia, la ratificación del aspecto contaminante que tiene y que sea relocalizada”. Además Leissa se mostró convencido que lo más importante en este momento es “acumular la mayor cantidad de pruebas (de contaminación) posible para que Botnia se vaya del lugar donde está”. Remarcó que “tiene que quedar bien en claro que la Asamblea tiene un planteo irrenunciable que es que el control no es para mantener un hecho consumado”, y en ese sentido puntualizó que “este proceso debe concluir con el desmantelamiento de Botnia”. “Que se entienda que esto no puede ser bajo ningún punto de vista de entretenimiento, sino una firme decisión del Gobierno Nacional de ratificar todo lo que se sabe: el carácter contaminante de la pastera”. El plan de monitoreo no incluiría a Brasil Desde el Gobierno se dieron algunas pistas del alcance que tendría el plan de monitoreo ambiental sobre el río Uruguay que el canciller Héctor Timerman le presentó a su par uruguayo Luis Almagro. Al respecto se supo que el proyecto no incluirá a Brasil como tercer país para instrumentar los controles, y la Argentina pretende sumar a la Prefectura Naval a los trabajos. La presidenta Cristina Kirchner y el Canciller fueron quienes revelaron aquellas dos precisiones, al tiempo que expresaron la expectativa oficial por superar a partir de este trabajo conjunto el entredicho con Uruguay. Timerman viajó a Montevideo para presentar la propuesta argentina de monitoreo ambiental ordenada por el fallo de la Corte Internacional de Justicia de La Haya. Almagro, su contraparte uruguaya, expresó que la semana próxima se comunicará la respuesta formal de su país sobre la iniciativa para evitar la contaminación del río. La Argentina tiene como principal petición poder ingresar en las instalaciones de la pastera UPM (ex Botnia) en la margen uruguaya del río, en la localidad de Fray Bentos, para poder tomar muestras allí. Reiteró que la posibilidad de que Brasil participe de ese control ambiental fronterizo "la tendrán que discutir los presidentes" y recordó que eso "no está en el fallo de La Haya". (Fuente: El Día de Gualeguaychú)