A
pocas horas del levantamiento, el sábado último, del corte del puente internacional General San Martín, luego de 43 meses de bloqueo, comenzaron a hacerse públicos algunos cuestionamientos de fraybentinos contra la pastera, que habían quedado opacados por la preocupación que generaba el bloqueo del lado argentino. Los comerciantes de esa ciudad, capital del departamento de Río Negro, se quejaron porque, a más de dos años y medio de estar funcionando allí, la planta no compra insumos a las empresas locales, sino que adquiere los productos únicamente en las grandes firmas de Montevideo. El titular de la Asociación Comercial de Fray Bentos, Leonaro Cayrus dijo al diario uruguayo El País: “Le hemos dado todo el respaldo (a la empresa), es un pueblo que espiritualmente les ha dado todo y no veo que haya una interrelación con la sociedad, hay una relación más bien fría. Como asociación le hemos hecho saber a las jerarquías de la empresa sobre la preocupación que tenemos”, resaltó. Y reclamó “romper con la estructura de las megaempresas (que proveen a UPM)” porque “Fray Bentos merece un tratamiento especial”, opinó. En cambio, las autoridades aseguraron que en el último año ingresaron al país por UPM 39 millones de dólares.