L
a presentación fue en la mañana de este viernes, en la cual ofició como querellante en la causa titulada “Busti, Jorge Pedro contra directivos de Botnia”, en la sede del Juzgado Federal de Concepción del Uruguay. La finalidad reside, según Busti, “en que los directivos de Botnia concurran a esta causa a la cual están citados por el Fiscal Federal y se ponga en práctica un principio jurídico moderno del derecho ambiental, como la inversión de la carga de la prueba y comprueben que durante 30 años Botnia no van a contaminar, período en que está estipulada la concesión”. “Vengo con el secretario parlamentario de la provincia, el Dr. Jorge Gamal Taleb, para presentarme nuevamente ante el Juzgado Federal contra los directivos de Botnia en la causa por el delito de contaminación en grado de tentativa”, declaró Busti ante un cúmulo de periodistas apostados en espera de sus declaraciones. En este marco dijo que lo hizo acompañando la sentencia del Tribunal de la Haya dictada el 20 de abril, “la cual marca claramente el incumplimiento por parte del Uruguay del Estatuto del Rio Uruguay, construyéndose la papelera sin ningún control externo”. Luego agregó: “Además venimos a solicitar mediante este impulso que hicimos de la causa que la cancillería argentina le solicite a la cancillería uruguaya que ponga en funcionamiento el exhorto internacional con el fin de que los directivos de Botnia concurran a esta causa a la cual están citados por el Fiscal Federal y hagan jugar la inversión de la causa de la prueba que es el principio del Derecho Ambiental, en el sentido de que prueben de que durante 30 años que tiene de concesión para estar instalados, Botnia no van a contaminar”. Consultado sobre estudios de impacto del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI), los cuales no dan hasta el momento grados de contaminación en la zona de Botnia, Busti declaró que “INTI siempre estuvo en contra de esta causa y a favor de los intereses de Botnia, pero nosotros tenemos estudios presentados por la Universidad Nacional de Córdoba, de la Universidad Nacional de La Plata y su cátedra de Hidrología que prueban que la papelera sí contamina”. Otra de las aristas que movilizaron la curiosidad del periodismo presente fue que opinión poseía el ex gobernador en torno al papel del Gobierno Nacional en relación al tema. Sobre ello, Busti afirmó que le parece que el mismo es “ambivalente como siempre” y recordó la declaración del ex presidente Eduardo Duhalde, quien había manifestado el viernes pasado en Concordia que Botnia había sido fruto de la “ineficacia diplomática presidencial de Kirchner”. Así, el presidente de la cámara baja replicó la anécdota contada por Duhalde: “Cuando Botnia había comenzado a realizar los trámites para instalarse en Uruguay, Duhalde como presidente del Mercosur había acordado con el gobierno uruguayo para relocalizar la empresa en un lugar que no perjudique el medio ambiente y los intereses de ambos países, a partir un crédito internacional. Pero la ineficacia de Kirchner produjo que ese acuerdo se cayera ya que según la versión del canciller uruguayo que le informó de la situación a Duhalde, Kirchner no le atendía el teléfono a Tabaré Vázquez por un problema de derechos humanos por el cual Kirchner no estaba de acuerdo. Esa ineficacia en la diplomacia presidencial de Kirchner produjo que la historia terminase con Botnia instalada y todo un pueblo argentino y uruguayo enfrentado inútilmente”. Por su parte, y volviendo al plano del impacto medio ambiental que la empresa produciría en Gualeguaychú y sus adyacencias, Busti manifestó que “lo que yo vi con mis ojos no lo puedo olvidar. Hace cuatro meses recorrí en lancha toda la zona y pude ver un cambio absoluto del ecosistema, de la vegetación, la flora y fauna que realmente nos dejó muy preocupados a todos. Y en este sentido, la sentencia de la Haya lo dice claramente en el sentido de que el Estatuto del Rio Uruguay habilita a controlar solo el agua pero no se controló el aire, la polución que abiertamente es contaminante y se proclamó, en este sentido, incompetente con respecto a los efectos del impacto negativo sobre el turismo y la producción”. Por lo cual Busti remarcó que “queremos y bregamos para que Botnia que está ubicada en zona franca, habilite y permita que científicos argentinos y uruguayos realicen un verdadero monitoreo efectivo, entrando a la empresa y viendo como fabrica y en qué condiciones lo hace”. “Esto es totalmente factible porque el fallo de la Haya dice que la manera de hacer esto es con dos principios del derecho internacional que son la cooperación de los dos países y la buena fe que es como se interpretan todas las controversias de acuerdo al Tratado de Viena. Tiene que haber buena fe y cooperación del gobierno uruguayo para que Argentina peuda monitorear en serio esto”, resaltó Busti para culminar.