C
uando nadie lo esperaba, el presidente uruguayo José “Pepe” Mujica puso pie en Buenos Aires y en Olivos prepararon todo para una cumbre bilateral con Cristina Kirchner. Según trascendió en medios locales y orientales, la visita era para tender redes de diálogo a la espera del fallo del tribunal de La Haya por el conflicto ambiental con la pastera Botnia, aunque luego del cónclave minimizaron el alcance del temario y lo centraron en "gestiones de gobierno". El ex tupamaro viajó para “intentar definir los interlocutores de cada país para luego del fallo que dará a conocer el próximo 20 de abril la Corte Internacional de Justicia de La Haya, sobre el conflicto por la instalación de la pastera de UPM (ex Botnia) en Fray Bentos”, adelantaron a El Observador fuentes del gobierno. Pero el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, desmintió que se hubiera avanzado en esa línea. “Hablaron de las primeras charlas de Mujica con Evo Morales –presidente de Bolivia- para el plan de Uruguay de comprarle gas a Bolivia, que debería ser transportado por gasoductos que pasan por Argentina, y del dragado de puertos”, aclaró el jefe de ministros. Del conflicto ambiental, dijo que “hay que esperar el fallo de La Haya”. “Hay que esperar a que se produzca el fallo de La Haya porque así lo han convenido los presidentes”, dijo el titular de la cartera de ministros a la prensa. “Estamos prácticamente en la conclusión inminente”, agregó sobre el tema de la pastera, que según comentó no fue parte del temario de la charla. El segundo y escabroso punto que, decían, se tiraría sobre le mesa, era el veto que el ex mandatario uruguayo, Tabaré Vázquez, le había puesto a Néstor Kirchner cuando éste fue propuesto para ocupar la secretaría general de la UNASUR (Unión de Naciones Suramericanas). Mujica estaría dispuesto a dar su aval a la designación del ex presidente en ese cargo regional. Pero otra vez, Fernández descartó que se haya hablado del tema: “No se tocó el tema de la UNASUR porque dentro de poco habrá una reunión”, aseguró. El encuentro se había pautado de urgencia para esta tarde el pasado viernes, por la apretada agenda de ambos mandatarios. Mujica partió en helicóptero directamente hacia la residencia presidencial. Tras la cumbre volvería a su país, desde donde partirá este martes con destino a Caracas, donde lo espera el presidente de Venezuela, Hugo Chávez. Cristina viaja el jueves a Washington.