L
a Dirección de Tránsito Urbano del Municipio informó que este jueves se realizará un corte de tránsito en calle La Paz, en su intersección con calle Corrientes, debido a que comenzarán las obras de prolongación de la Peatonal San Martín, en el tramo comprendido por calles La Paz y Colón, lado este de la Plaza San Miguel. Detalles La nueva cuadra de peatonal entre La Paz y Gardel no se parecerá a la existente, sino que tendrá un “dibujo” diferente, similar al que se utilizará en el mandapeatón de la Catedral. Este piso coincidirá con el de las veredas, que se harán asimismo a nuevo. Los trabajos se realizarán directamente sobre el asfalto, aunque posiblemente se rebaje la parte media de la calzada para que coincida con las veredas. Todo quedará a un solo nivel. La ampliación se diseñó pensando en los artesanos, cuyas ferias de Navidad, Semana Santa y vacaciones de invierno se instalan en Plaza Alvear, por decisión de esta gestión municipal. “El piso de la Peatonal (existente) se torna resbaloso cuando llueve y no funciona bien con carpas”, explicó explicó el subsecretario de Planificación, Eduardo Loréfice,. “Este mismo diseño se usará a futuro en otras ampliaciones de la Peatonal y en el mandapeatón sobre el cruce con La Paz, con lo cual habrá una continuidad de nivel con la Peatonal actual, aunque no el mismo tipo de piso”, dijo. Este paseo peatonal se integrará a la Plaza Alvear y “revalorizará la cuestión cultural”, queriendo aunar en un conjunto armonioso los museos que funcionan en torno a la plaza y la feria artesanal. Además, se agregará mobiliario y farolas construidos según un nuevo diseño, que se multiplicará en Avenida Ramírez, agregó poor último Loréfice. Mandapeatón frente a la Catedral En cuanto al mandapeatón, que se hará en simultáneo con la extensión de Peatonal San Martín, se elevará la calzada usando materiales similares. “El mandapeatón unirá la Plaza 1 de Mayo con la vereda de la Catedral, con una continuidad de solado entre la Plaza y la Iglesia, lo que producirá una circulación muy lenta, priorizando el área peatonal”, describió Loréfice. “El diseño va a establecer un serpenteo y una restricción en la circulación, dando prioridad para el peatón”, subrayó. El mandapeatón se hará sobre el pavimento y tendrá características similares al sobre-elevado del piso que se observa en el cruce entre Peatonal y Urquiza y que cumple funciones de reductor de velocidad. Pero el mandapeatón de la Catedral abarcará “casi toda la cuadra” y será “una intervención que resaltará el carácter de la Plaza y de las edificaciones que se encuentran alrededor”. Justamente, se quiere poner el acento en el uso peatonal del área central, y por eso el mandapeatón se vincula estrechamente con la extensión de la Peatonal San Martín una cuadra más, hasta Colón. El dato $ 2,4 millones se destinarán a la ampliación de la Peatonal y la construcción del reductor de velocidad frente a la Catedral. Dentro de este monto se incluyen las reparaciones y una mejora en los desagües de la Peatonal que salen a calle La Paz, destrozada con las últimas lluvias, se reconoció oficialmente. Los desagües costarán $500.000. Polémica: consideran que la obra “es innecesaria” Entidades y vecinos de la zona pusieron reparos ante los anuncios de la obra en ese tramo de calle San Martín. A mitad del año pasado, enviaron notas al Ejecutivo Municipal expresando la posición y sus fundamentos. Principalmente, basan el planteo en que la intervención empeorará el estado del tránsito –de por sí, abigarrado en las horas pico- y anulará un espacio de estacionamiento –tema también complicado en la zona del microcentro-. A eso añaden el hecho de que las características de la cuadra no reúne el perfil comercial, aspecto que generalmente origina un proyecto de “peatonalización”. Es que entre La Paz y Colón, en el lado este de la traza, hay un centro médico con consultorios, la Bolsa de Cereales de Entre Ríos, la sede del partido radical, la Casa de Italia donde funciona la escuela privada Galileo Galilei, un estudio jurídico y una torre con departamentos. En frente, está la Plaza Alvear. Por esas características, “la cuadra en cuestión no tendrá nunca la posibilidad de transformarse en comercial, lo que tal vez podría haber justificado su peatonalización”, expresó José Carlos Larghi, un vecino, quien escribió una carta publicada en los primeros días de enero en un diario local.