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os especialistas en hidrometeorología, reunidos en un foro para estudiar los escenarios que plantea el fenómeno climático “El Niño”, concluyeron que las lluvias superiores a los registros normales continuarán en el primer trimestre del 2010. Al mismo tiempo, llamaron a los organismos de defensa civil a incrementar las acciones para resguardar a la población ribereña, principalmente del río Paraná. Advirtieron que el volumen de agua almacenado en el conjunto de embalses de la cuenca del Paraná es el mayor de los últimos 10 años para esta época del año, “con un elevado nivel de humedad del suelo y alto potencial de escurrimiento superficial asociado”. Indicaron que los excesos de precipitaciones registrados desde setiembre del 2009 en el sureste de Paraguay, nordeste argentino, sureste de Brasil y Uruguay, acompañados de severas tormentas y crecidas extremas de los grandes ríos, en especial en la cuenca del Paraná y Uruguay, ocasionaron severas afectaciones a la sociedad y a las economías, las cuales revelan una alta vulnerabilidad de la región a los efectos del Niño. El “Foro Nacional sobre Gestión de Monitoreo y Previsión Hidrometeorológica afines a la Generación Hidroenergética”, se realizó en Asunción, organizado por la Entidad Binacional Yacyretá, con participación de técnicos de Itaipú, Ande, de expertos de la Dirección de Meteorología de la Dinac, de la Organización Meteorológica Mundial, y exponentes de organismos oficiales y civiles. El objetivo del evento fue propiciar el intercambio de informaciones, conocimientos y tecnologías de los entes encargados de la predicción climática y los impactos hidrológicos asociados al “Niño”, un evento que se produce por el cambio de temperatura del Océano Pacífico, y que para nuestra región significa lluvias por encima de los niveles normales. Al sentar las conclusiones, los expertos coincidieron en la necesidad de incrementar y coordinar, con los encargados de la defensa civil, tanto municipales como regionales y nacionales, los medios de alerta temprana. Consideran que una reacción oportuna permitirá reducir el impacto del fenómeno sobre la producción agropecuaria, industrial, artesanal, sobre los servicios de transporte, luz, y agua, y sobre las poblaciones y el ambiente de ciudades ribereñas y no ribereñas, así como los servicios educativos y de salud. En cuanto a los indicadores hidroclimáticos, explicaron que “El Niño” se encuentra en fase madura y continuará hasta marzo, de acuerdo a las estimaciones de centros climáticos de referencia nacionales e internacionales. Los pronósticos favorecen al aumento de los caudales actuales y una alta frecuencia de inundaciones ribereñas, aguas abajo de Itaipú (zona de Ciudad del Este), y aguas arriba y aguas debajo de Yacyretá (Itapúa, Misiones y Ñeembucú) de Paraguay, y las provincias Argentinas de Misiones, Corrientes, Chaco, Entre Ríos, Santa Fe y Buenos Aires.