M
ientras se aguarda el fallo del tribunal de La Haya, la Asamblea Ciudadana Ambiental de Gualeguaychú podría denunciar penalmente al presidente uruguayo Tabaré Vázquez como responsable político en la causa que se instruye en el Juzgado Federal de Concepción del Uruguay contra directivos de la pastera Botnia por contaminación ambiental en grado de tentativa. El asambleísta y abogado Víctor Rebossio admitió que la investigación “está empantanada”, porque ni siquiera fue posible notificar a los directivos de Botnia, denunciados en 2006 por el entonces gobernador Jorge Busti y el vicegobernador Pedro Guillermo Guastavino. Sin embargo, adelantó que se analiza ampliar la denuncia penal contra Tabaré Vázquez, a quien consideró “el verdadero responsable, por su rol dirigencial, de la radicación de la pastera”. A los efectos judiciales, se pretende hacer al jefe de Estado “responsable por los actos de gobierno” e imputarlo como participe necesario del delito de contaminación ambiental, por presuntas violaciones al Código Penal, a la Constitución Nacional y al Estatuto del Río Uruguay; y se considera que no sólo son competentes para intervenir la Justicia Federal argentina y la Unidad Fiscal de Investigación en Materia Ambiental (Ufima), sino también la Corte Interamericana de Derechos Humanos; y recordó como antecedente el proceso que se realizó en España contra directivos de Ence que terminó con su condena por la contaminación de la Ría de Pontevedra. El abogado señaló que “durante su campaña electoral, Tabaré Vázquez dijo que no propiciaba la instalación de industrias sucias, pero después dio un giro en su discurso e impulsó la radicación de Botnia sobre el río Uruguay, perjudicando de esa forma el medio ambiente entrerriano y la soberanía argentina, porque se exporta la pasta de celulosa que se produce con recursos naturales argentinos sin entregar nada a cambio”. Expectativas De todas maneras, la medida no parece más que la búsqueda de un impacto en momentos en que las negociaciones están trabadas y que ambos países están a la espera del fallo de la Corte Internacional de Justicia de La Haya, si bien es cierto que la llegada de José Pepe Mujica a la Presidencia abrió nuevas perspectivas, tanto en el gobierno argentino como en los propios asambleístas. El dirigente Jorge Fritzler admitió que “Mujica tiene la oportunidad de solucionar el conflicto que desaprovechó Tabaré Vázquez” y ratificó la voluntad de diálogo del colectivo ciudadano de Gualeguaychú, siempre y cuando no se ponga como condición el levantamiento del corte de ruta. Al respecto, Rebossio acotó que “el corte es el patito feo en este conflicto, pero el impacto lo genera la industria sucia sobre el río Uruguay, así que si Mujica viene por el corte, que ni se moleste, porque no estamos dispuestos a rifar tres años de lucha con el levantamiento de la protesta”. En tanto, Osvaldo Fernández, otro de los dirigentes de la organización, ratificó “la vocación de diálogo con las autoridades electas” y en ese sentido cuestionó la política del gobierno actual: “Con Tabaré Vázquez no hay negociación porque ha efectuado una defensa acérrima de Botnia y ha tenido actitudes represivas y autoritarias contra la Asamblea”. De todas maneras, los tres dirigentes negaron de plano haber mantenido contactos con el Presidente electo o referentes del futuro gabinete en el gobierno del Frente Amplio que asumirá el 1º de marzo. En acción Mientras tanto, las acciones de la Asamblea parecen reducidas a la concientización de la población, especialmente de los turistas que llegan a Gualeguaychú durante el verano, y los dirigentes reconocen por lo bajo que hace un tiempo que no se generan acciones de alto impacto mediático. La organización mantiene también un espacio en la apertura de cada una de las comparsas que participa del Carnaval del País; pero se ha perdido el contacto con las asambleas de Colón y Concordia, con las que supo coordinar acciones sorpresivas en forma conjunta, y este año ni siquiera se menciona la posibilidad de adherir a la protesta con el bloqueo del puente internacional durante el recambio de turistas en vacaciones; y tampoco hay comunicaciones con representantes del gobierno provincial o nacional, aunque los asambleístas aclaran que “el diálogo no está cortado”. Sin dudas los ojos de este 2010 están puestos en el fallo del tribunal internacional de La Haya que se espera para los primeros meses del año. Los ambientalistas convocarán a una asamblea popular que involucre a toda la ciudadanía para decidir qué medida tomar luego que se conozca el veredicto, porque consideran que entonces comenzará otro conflicto. (El Diario).-