C
ifras de organismos del Departamento de Salud indican que alrededor del 60% de la población de ese país está excedida de peso o es obesa. Eso representa un aumento en el número de enfermedades cardiovasculares, diabetes y algunos tipos de cáncer y un incremento en los gastos de salud. Según científicos de la Universidad de Columbia y el City College de Nueva York, el análisis de entrevistas a más de 3.500.000 de individuos realizadas entre 1993 y 2008 determinó que la obesidad se ha convertido en un peligro tan grave para la salud como el consumo del tabaco. Las entrevistas incluyeron preguntas sobre la calidad de vida, problemas de salud, así como un estudio sobre salud mental física de la población en general. Los investigadores indicaron que entre 1993 y 2008, cuando la proporción de fumadores declinó en un 18,5% en los Estados Unidos, la pérdida de calidad en años de vida se mantuvo estable en un nivel de 0,0438. Durante ese mismo lapso, la obesidad en la población aumentó en un 85% lo que significó una pérdida de calidad en años de vida de un nivel de 0,0464. En esos años, el consumo de tabaco se reflejó en el número de muertes, en tanto que el impacto mayor de la obesidad se produjo en la cifra de enfermedades, según los científicos. Estos resultados confirman las conclusiones de un estudio anterior, difundido en marzo de 2009 por la revista Lancet, que había advertido que la obesidad severa acorta la vida tanto como el cigarrillo. De acuerdo a esta investigación, dirigido por especialistas de la Universidad de Oxford, los kilos de más reducirían entre ocho y diez años la vida de las personas. Aunque la expectativa de vida haya mejorado con el tiempo, el aumento de la contribución a la mortalidad que representa la obesidad podría llevar a una declinación futura en esa expectativa de vida, advirtieron los científicos. Añadieron que los datos de su investigación son esenciales para reducir riesgos modificables para la salud como el consumo del tabaco y la obesidad.