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e la redacción de INFOME DIGITAL El 20 de noviembre de 2006, en protesta por la pastera Botnia, los asambleístas comenzaron el bloqueo por tiempo indeterminado en el puente General San Martín, que une la ciudad entrerriana con Fray Bentos. No ha habido autoridad de la Iglesia que haya definido tan claramente una posición respecto del paso internacional. También es un mensaje para todos los políticos que avalaron el corte con distinos matices electorales. Monseñor Estanislao Karlic conoce al actual Papa desde que era un joven teólogo que enseñaba en Ratisbona, y que tejió con él una estrecha amistad cuando trabajaron juntos en la redacción del Catecismo de la Iglesia Católica, entre 1987 y 1992, y por él fue creado Cardenal en 2007. Es un reconocido predicador de ejercicios espirituales, dos veces presidente de la Conferencia Episcopal Argentina y muy estimado por su papel en la mesa coordinadora del Diálogo Argentino durante la crisis de fines de 2001. Esta vez su prédica llegó Comité Capital de la UCR, que lo invitó a disertar sobre “Política y Humanismo”, en un cierre de jornadas por los 26 años de democracia en Argentina. “La vida política tiene que buscar que la persona sea más hombre, que sea más hombre siendo más solidaria en la familia y en el mundo, en la comunidad internacional”, empezó a desgranar Karlic, luego de 50 minutos de reflexiones sobre la conducta humana, tiempo en que solo quedó INFORME DIGITAL de los medios que habían llegado para registrar sus reflexiones a esta altura. Basándose en su mención a la comunidad internacional, fue cuando el Cardenal lanzó la opinión sobre el corte de Gualeguaychú: “Nosotros aquí estamos viviendo la sociedad internacional no solo por los medios de comunicación, sino por el tránsito de vehículos y personas a través de Entre Ríos, que vienen del Océano Atlántico y van al Pacífico”. “Nosotros no tenemos derecho a decir por aquí no pasen” Karlic dijo en tono crítico que “nosotros estamos dejando que pasen las cosas al lado nuestro sin tener conciencia de lo que eso significa, nosotros somos los que posibilitamos ese paso, porque aquí estamos, somos los responsables de este pedazo del mundo, tenemos que asumir esa conciencia para que su paso por aquí sea enriquecedor, para ellos y para nosotros, nosotros no tenemos derecho de decir no por aquí no pasen”. “¿Pensamos todo lo que significa eso como comunicación, como trato con la gente, como aprendizaje de la gente que pasa por nuestra casa?, se preguntó Karlic, para sentenciar que “no solamente que tenemos que administrar sino que tenemos que considerarnos hermanos, por lo tanto socios, si hablamos en términos de sociedad, ¿Somos capaces de esto?”, volvió a preguntarse la autoridad eclesiástica ante el público presente. El voto y el poder Otra de las reflexiones de Karlic apuntaron al consenso en la política, algo por estos días discutido por la nueva composición parlamentaria nacional con mayoría opositora y el pasado de imposiciones kirchneristas. “El voto no vale por ser mayoría, vale porque en la mayoría da más garantías de verdad y bien, ¿sino para que votar?, ¿Por el poder?, no señor”, y citó al Papa: “Dice Benedicto: `cuando no se acepta la verdad, la solución viene por el poder, y así no puede ser”, para luego cerrar con la reflexión: “yo no quiero ser dominado por nadie”.