E
ntre los fundamentos expuesto en dicho Proyecto se especifica que “La utilización de animales en distintos espectáculos como circos u otros similares supone una violación a la Declaración Universal de los Derechos del Animal promulgada por la UNESCO en el año 1978, la que entre sus normas establece ningún animal debe ser explotado para esparcimiento del hombre, además, de que la utilización de animales en espectáculos es incompatible con la dignidad del animal”. En el mismo texto se explica: “La Sociedad Mundial para la Protección de los Animales está planteando ante la Organización de Naciones Unidas una Declaración Universal para el Bienestar de los Animales. En la misma se reconoce que los animales son seres vivientes capaces de sentir y por lo tanto merecedores de consideración y respeto”. Por otra parte, se indica, “debe considerarse además el riesgo que tales animales significan para la sociedad, por cuanto el tormento y la tortuosa condición de vida que los mismos deben soportar genera en ellos el deseo de escapar y ha habido casos que cuando logran escapar ocurren graves e inesperados accidentes. Existe un sin número de filmaciones de ataques de animales tanto a sus entrenadores como al público asistente y en muchos casos esto termina con la muerte del animal por parte de las fuerzas de seguridad”. Para culminar, los legisladores entrerrianos Jorge Maier y Juan Domingo Zacarías, sosteniendo su firme compromiso, señalan que “queda probado que los animales que son sometidos a participar en distintos espectáculos son necesariamente privados de una vida digna de la cual son merecedores por el solo hecho de existir y formar parte del medio ambiente que el Estado está constitucionalmente obligado a proteger”.