P
ionero en Latinoamérica y aunque con el terminante rechazo de la Iglesia, el Senado uruguayo aprobó este miércoles la reforma legal que habilita la adopción de niños a parejas homosexuales y que necesita sólo el visto bueno del Ejecutivo para ser todo un hecho. Se trata de un proyecto de ley de modificación del Código de la Niñez y la Adolescencia que data de 2006 y que siempre tuvo la intención de aprobarse antes de las próximas elecciones nacionales, el 25 de octubre de este año. Así, la Cámara de Diputados aprobó el pasado 27 de agosto, con algunas modificaciones, la norma que avala a una pareja gay tener a su cargo la crianza de un hijo. Y esta mañana, en una jornada histórica dentro del recinto uruguayo, de los 23 senadores que expresaron su voto, 17 lo hicieron a favor de esta reforma, indicó a la agencia Efe un portavoz de prensa del Senado. El respaldo provino de los senadores del gobernante Frente Amplio. La negativa estuvo en manos de la principal fuerza opositora, el Partido Nacional o blanco por entender que la adopción es contraria a la definición de familia que describe la Constitución uruguaya. Quien también manifestó un férreo rechazo a la norma fue la Iglesia uruguaya que considera que las figuras materna y paterna “son fundamentales” para el desarrollo del niño. En reacción, un reciente comunicado del Arzobispado de Montevideo había señalado que la adopción por parejas homosexuales "es ir contra la misma naturaleza humana" y "contra los derechos fundamentales del ser humano como persona". Sin embargo, más allá de las críticas sociales, religiosas o políticas, la última palabra la tendrá el presidente de Uruguay Tabaré Vázquez, a cargo del Poder Ejecutivo y encargado de vetar o no la decisión de las dos cámaras. El noviembre del año pasado, cuando el Parlamento uruguayo despenalizó el aborto, Vázquez dio marcha atrás. Veremos qué decide al respecto.