U
n predio situado en las afueras de la ciudad de Victoria será subastado por orden judicial, aunque los posibles oferentes deben saber que dentro –mejor dicho, debajo– de las 5 hectáreas del lote se encuentran los restos de 350 personas que han sido sepultadas allí. Es la primera vez en el país que un cementerio va a remate. Se trata del parque privado Colinas del Recuerdo, que llegó a esta situación a partir de un reclamo de haberes de ex empleados. La subasta está prevista para el 31 de agosto, y partirá desde una base de $71.180 pesos. Se rumorea que sería una firma de sepelios de Victoria la que se presentaría como principal interesada, puesto que el emprendimiento fue habilitado por el municipio en la década del ’90 por 99 años de funcionamiento. Y la presencia de “numerosos cadáveres” (tal como advierte el edicto judicial) hace suponer que desalienta el arribo de cualquier otro inversor. Por esa razón, quizás, es que en esta ciudad ninguna familia se acercó hasta el cementerio o hasta el juzgado de Maricella Faccendini a preguntar por el destino del pariente que tiene sepultado en el Colinas del Recuerdo. "Se hace saber que los inmuebles a subastarse se encuentran afectados al funcionamiento de un cementerio privado y que en los mismos existen numerosos cadáveres", reza el edicto que anuncia la subasta de este predio, situado en zona de quintas, cerca de la Sociedad Rural de Victoria. El emprendimiento fue abandonado por sus dueños tras la crisis de 2001, y los empleados quedaron a la deriva. Y fue un grupo de ellos el que llevó su reclamo judicial hasta el pedido de quiebra y remate para cobrarse salarios adeudados.