E
l paro que los trabajadores petroleros llevan adelante en el país pero con especial desarrollo en el sur de la Argentina tendrá serias repercusiones en la distribución de gas envasado en Entre Ríos en las próximas 48 horas. El reclamo por una recomposición salarial del 25% iniciado por la Federación Argentina Sindical del Petróleo y Gas Privados, podría causar desabastecimiento en los hogares. Así lo anunciaron titulares de empresas distribuidoras que desde el lunes no comercializan sus productos por las protestas de los trabajadores, quienes se instalaron en las puertas de los depósitos para impedir el ingreso y la salida de camiones de reparto. Juan Ayala, secretario general del sindicato de Petróleo y Gas Privados de Entre Ríos, afirmó que hay unos 500 trabajadores del sector que necesitan mejorar sus ingresos. El sindicalista aseguró: “Hace más de 90 días que venimos hablando con la parte empresarial. Estamos esperando que el Ministerio de Trabajo llame a la parte empresarial para acordar el incremento, que tiene que ser del 25%”. El reclamo tuvo ya una conciliación obligatoria durante julio y una extensión de esa medida dispuesta por el Ministerio de Trabajo de cinco días más. A partir de ese momento, las partes quedaron liberadas y se inició la protesta sindical con un paro por tiempo indeterminado que el lunes tuvo su primer día. En Entre Ríos, las protestas están instalada en las puertas de las distribuidoras, depósitos y plantas. Lo cierto es que el reclamo podría derivar en un desabastecimiento porque toda la cadena de comercialización está paralizada. Para evitar un impacto en los sectores de menores recursos, que es donde mayormente tiene incidencia el uso de este combustible en garrafa, ya sea para cocinar o para calefaccionar el ambiente, los manifestantes permiten que se retire la garrafa social. “Estamos vendiendo únicamente la garrafa social, porque no podemos sacar los camiones”, detalló Oscar Acosta, representante de la distribuidora Shell ubicada en la zona de Bajada Grande. “La situación es crítica, ya que los subsidios van a las grandes empresas”, aseguró Acosta, quien afirmó: “Apoyo el reclamo de los muchachos, pero la Municipalidad de Paraná y el Gobierno de Entre Ríos jamás cumplieron con sus promesas de atenuar la carga impositiva para el sector”. “En setiembre, cuando se firmó el precio de la garrafa social, estuvimos en Planeamiento de la Nación y nos prometieron a los distribuidores que nos iban a sacar los impuestos municipales y provinciales”, dijo y añadió: “Elevamos notas a la Provincia y al municipio y nos prometieron subsidiar el gasoil, pero quedó en una promesa”. El dueño de la distribuidora aseguró: “Se ayuda económicamente a los grandes empresarios”. Por último, Acosta mencionó: “Estamos con los muchachos, pero se nos hace imposible aumentar, ya que nosotros estamos agobiados”. Industrial La medida, de extenderse, tendrá su impacto en algunos sectores productivos que utilizan el gas licuado a granel como combustible principal. En el interior de la provincia de Entre Ríos, en especial, hay empresarios que están preocupados porque los camiones que cargan el gas licuado no están saliendo de las plantas, ya que los obreros impiden que se muevan los camiones repartidores. “El paro es nacional y por tiempo indeterminado”, precisó Carlos Gareis, dirigente del sindicato, que junto a un grupo de personas bloquea el ingreso y egreso de camiones a la planta sita en avenida Larramendi en Bajada Grande. “Las empresas tuvieron ganancias enormes en los últimos años y los trabajadores hemos quedado atrasados”, resaltó el sindicalista. A través de un panfleto los huelguistas aseguran que “van a tener que acordar el 25% de aumento, o no van a vender una sola garrafa en la República Argentina”. “No se movió un camión” Los distribuidores de gas envasado de Paraná indicaron que desde este miércoles podría comenzar a faltar gas en los comercios barriales, en especial debido a que la mayoría de los locales compra para el día y desde el sábado no se comercializan garrafas o tubos. “La contundencia de la medida es letal para nosotros porque no vendemos, no podemos pagar los sueldos y estamos medio fundidos”, comentó el propietario de una planta de la zona de Paraná. Además otro distribuidor de la zona de avenida Ramírez resaltó que “hay empresas que están distribuyendo y eso provoca perjuicio para unos y beneficio para otros porque se les permite vender”. (Fuente: Diario Uno)