E
l Hospital San Roque recibe a pacientes de hasta 15 años. Por lo tanto, suena un tanto ilógico pensar que semanalmente atienda un número considerable de chicos que han sufrido severas lesiones en accidentes de motos, ya que los menores de edad no pueden conducir esos vehículos y, en el caso de menores de 10 años, tampoco deberían viajar como acompañantes. Sin embargo, la cantidad de asistidos en la institución de calle La Paz no es poca y las lesiones que suelen sufrir son de consideración y en algunos casos, de gravedad. Las autoridades y los médicos del hospital han llamado la atención sobre estos hechos y reclaman con insistencia que los padres tomen conciencia de la peligrosidad que significa transportar chicos en motocicletas. En las calles Alcanza con recorrer el centro de Paraná en horario pico para comprobarlo: cada vez hay más motos en la ciudad. Se calcula que son más de 40.000 las que andan por la ciudad. Esa cifra sólo se puede calcular ya que alrededor del 50 % de esos vehículos no están empadronados ni registrados. En los últimos tiempos, los motociclistas han protagonizado violentos accidentes de tránsito, con víctimas mortales en algunos casos. El hecho más trágico, resonante y reciente fue el de una beba de 19 meses que falleció cuando la moto en la que la transportaba su papá chocó a un auto. Es sabido que cualquier persona es más vulnerable en un accidente si se conduce en una moto que en otro vehículo ya que su cuerpo no encuentra protección alguna en un choque. Pero mucho más expuesto está un niño en esas circunstancias, ya que a la natural fragilidad de su estructura anatómica se le suma la inexperiencia para conducirse en moto, la falta de reflejos y equilibrio. Por eso es que se desaconseja que viajen como acompañantes. En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, por ejemplo, rige la prohibición total de que los menores de 16 años acompañen a los motociclistas por más que tenga el casco puesto, y tampoco pueden circular con más de un acompañante, y eso siempre y cuando se tengan dos asientos y no uno solo como tiene la mayoría en la actualidad. Además se pide que ese asiento tenga posapiés y agarradera. Legal En Paraná, hasta ahora no es ilegal que un menor vaya como acompañante en una moto. Así lo confirmó el director de Tránsito Municipal Mario Sosa quien destacó que lo que se requiere como obligatorio es el uso del casco y carné de conductor. “No hay una edad determinada para ir como acompañante, sí para manejar motos, obviamente. Pero la ley no dice nada con respecto al que acompaña. En ese caso, el que se hace responsable es el que maneja”, indicó. Igualmente, aclaró que los que se conduzcan en una motocicleta no pueden ser más de dos personas. “Cuando hay tres, intervenimos y ahí suelen producirse discusiones. No faltan los insultos y las amenazas por parte de los motociclistas”, aseveró. Sosa dijo que, por lo general, los padres llevan a sus hijos a la escuela en moto y no pocas veces son dos niños los que transportan. El justificativo de esos padres suele ser que se trata de un medio de transporte barato y rápido, en comparación con el colectivo o transportes escolares, pero no reparan que sin dudas es uno de los más inseguros y peligrosos. En el hospital “La mayoría de los traumatismos y politraumatismos que nosotros atendemos se dan generalmente por accidentes de motos. Los padres llevan a sus hijos en moto, a veces dos o tres, inclusive en brazos cuando se trata de bebés de pocos meses”, contó la jefa de la Guardia Central del Hospital San Roque Fernanda Peserico. La doctora indicó que ella se encarga de una guardia semanal en ese nosocomio y que durante ese día le toca atender dos o tres casos de niños accidentados en motocicletas. “Un caso de niño traumatizado por accidente de moto tenemos por día, al menos”, calculó. Así, señaló que el peligro mayor para el niño “es sufrir traumatismo de cráneo o traumatismo cervical”, ya que generalmente esos chicos ni siquiera llevan casco. “Nosotros tenemos establecido que en cualquier accidente de tránsito, sobre todo que afecte el cráneo, aunque sea leve necesita al menos entre 6 y 12 horas de observación. Si notamos que tiene pérdida de conocimiento se lo deja internado. Generalmente, cuando tiene más de un traumatismo, que puede ser también que esté afectado un órgano blando más traumatismo de cráneo lo dejamos en observación”, explicó. Peserico aseguró que le ha tocado atender casos de niños de todas las edades que se trasladaban en motos accidentadas. “Los adolescentes de más de 15 años van directamente al Hospital San Martín. Acá llegan los más chicos. En el San Martín, la gran mayoría de los jóvenes accidentados que llegan van a terapia intensiva y se trata de accidentes de motos”, subrayó. La titular de la Guardia del Hospital San Roque hace tiempo que viene preocupándose por esta alarmante cantidad de niños pequeños que sufren ese tipo de accidentes y se ha comunicado con sus colegas del Hospital San Martín para saber si esa realidad se repite entre los jóvenes y adultos. “Los casos que más nos tocan son los de los bebés que van en los brazos de la mamá. Sufren el impacto cuando chocan y no tienen ninguna protección. También, suelen llevar los nenes entre el padre y la madre, al medio. Generalmente se trata de niños en la edad preescolar y bebés, de meses a cuatro años generalmente”, describió. Cuando se le consultó cuál era la reacción de los padres al ver sus hijos pequeños accidentados, respondió: “Nosotros siempre les preguntamos por el casco y cuántos iban en la moto. Eso si el caso no es muy grave, porque a veces no tenemos tiempo ni de hablar con los padres. Pero si tenemos oportunidad les recalcamos que más de dos personas no pueden ir en la moto y que nunca pueden llevar a un chico menor de 10 años. Y también que ninguno puede andar sin casco”. En todos los casos hospitalizados interviene la Policía de oficio para dejar constancia del accidente. Finalmente, subrayó: “Los menores de 10 años no pueden andar en moto y los más grandes deben andar con casco. Uno puede observar en la calle que el 90 % anda sin casco y que una gran cantidad llevan a menores”. En las rutas El titular de la Dirección de Seguridad Vial de la Policía de Entre Ríos, Gustavo Maslein, señaló que si bien sería preciso que la legislación establezca alguna prohibición de transportar menores en motos, se trata de una cuestión de conciencia de los mayores conductores. La repartición a cargo de Maslein se ocupa del control del tránsito en las rutas de la provincia, no en ciudades, y por lo tanto las infracciones que se suelen cometer son de otro tipo. “Generalmente, se trata de falta de uso de cascos, de espejos, falta de patentamiento o sin luces”, precisó. En esos casos, se labra un acta y después se determina si corresponde la aplicación de una multa o no. “Igualmente, en las rutas hay menos infracciones de parte de los motociclistas que en las calles de una ciudad”, advirtió. (Fuente: El Diario)