E
l hecho ocurrió cuando un grupo de niños jugaba en el Barrio San Judas, en calle Acosta, entre calles Rocamora y Federación, y se produjo el incidente. Diego de 13 años y sus amigos de 10 y 9 años, manipulaban “un objeto explosivo” con un tizón de leña, explicó su papá. Se trataría de un cohete tipo mortero de «pirotecnia de uso comercial» que encontraron en el basural de Villaguay. Dada la gravedad de sus lesiones fue derivado al Hospital de Niños de Paraná. El padre del chico indicó que, según los médicos, perderá algunas falanges de su mano derecha, “pero le quedará movilidad en los dedos para escribir”.