Viernes 05 de junio de 2009
  |  
Policiales
Paraná: Un muerto y dos menores heridos tras feroz balacera
Javier Pin Barzola tenía un frondoso prontuario. Se enfrentó a tiros con un sujeto al que había baleado anteriormente. Perdió la vida y dos menores que quedaron en medio de la balacera resultaron heridos.
cuerpomuertocamilla.jpg
El cuerpo de Barzola fue retirado del Centro de Salud Carrillo

D

esde hace un par de meses, vecinos de jurisdicción de la comisaría 9ª se comunicaban con la prensa para quejarse por la impunidad con la que se movilizaba en esa zona un tal Pin Barzola, un delincuente que tenía a maltraer a quien se le cruzara en su camino cuando quería conseguir algo cometiendo un hecho delictivo, aun siendo algún chico o una mujer. Parecía que las críticas caían en saco roto y pese a que los damnificados, luego de tomar contacto con personal policial para denunciar, se anoticiaban de que Gonzalo Javier Barzola, de 28 años, contaba con más de una docena de causas abiertas por distintos hechos delictivos, ningún juez ordenaba sacar a tan peligroso exponente de las calles. Impunidad Incluso, hace muy pocas horas, la madre de un menor discapacitado, a quien Barzola había afectado tiempo atrás, clamaba a través de un contacto televisivo para que lo detengan, ya que una agresión contra su familia finalizó con serias secuelas, físicas y psicológicas, pasando a vivir confinados en su domicilio de calle Montiel y aterrorizados porque un hecho similar se volviera a repetir. “Voy a poder volver a dormir tranquila, algo que no logré desde que este tipo entró a mi casa y lo encontré al lado de mi cama. Había violentado las rejas para entrar y yo me enfrenté con él”, contó anoche a EL DIARIO Marta Broin, una de sus tantas víctimas, a quien se le escucha contar su dramática historia con mucha dificultad, ya que el ataque de aquella noche la afectó psicológicamente y físicamente y el tono de su voz se redujo a un ronco susurro. Apenas se le entiende lo que dice y ella habla de que puede tener afectadas las cuerdas vocales, pero aún está en tratamiento, todo debido al desencadenante de aquel asalto en su domicilio, ocurrido el 11 de mayo. “Por eso clamaba porque lo encarcelaran, para que no afectara a más gente como nos afectó a nuestra familia. Es duro decirlo, pero sabiéndolo muerto voy a poder estar tranquila de ahora en más”. “No tengo nada que decir de la policía, mucho menos de la comisaría novena, aquella noche que lo encontré metido en mi casa también entró a otro domicilio. Lo encontraron con todo lo robado y cuando lo vi, dos días después, pasar por el frente de mi puerta empecé a aterrorizarme. Me contestaron en la comisaría que no lo podían tener por más de 24 horas detenido, porque así lo estaba ordenando la Justicia, pero que la causa continuaba su curso”, recordó indignada Marta. Final de ley Barzola contaba incluso con enemigos en el ámbito del hampa y las primeras versiones que corrieron anoche hablaban de que se habría firmado su sentencia de muerte al lesionar un día antes a un sujeto que sería de apellido Godoy, que podría estar ligado a una conocida banda denominada de Los Condoritos. Midiéndose, no con gente inocente y desarmada, sino con alguien que quizá no le perdonaría una afrenta violenta, llevó a Barzola a morir según la ley y los códigos que instauró en su propia vida para pisar la calle. En la refriega que precedió a la muerte de Barzola, en calle Los Yaros y 1172, de barrio Anacleto Medina Sur, según informaron fuentes policiales, también resultaron heridos dos menores, una nena de 10 años, de apellido Islas y un adolescente de 15, de apellido Martínez, los que habrían quedado en medio del tiroteo que precedió al desenlace fatal. Los dos menores fueron trasladados al Hospital Materno Infantil San Roque donde se confirmó que el chico presentaba lesiones leves y la nena un impacto de proyectil a la altura del estómago, por lo que quedó internada en observación. El Pin Barzola fue trasladado herido y posiblemente aún con vida al Centro de Salud Carrillo, donde finalmente se constató que había muerto, producto de dos balazos que impactaron en su cuerpo, tras lo cual el juez interviniente dio las instrucciones de rutina para que se traslade el cadáver a la Morgue Judicial de Oro Verde y se realice la autopsia. Proyectil de recuerdo Barzola tenía un largo historial delictivo como también cicatrices que le dejó su vida violenta. Su apellido se mencionó en una de las últimas jornadas del juicio oral y público contra Cristian Pagliaruzza, por el asesinato de la suboficial de Policía Silvia Depardón, debate que fue anulado la semana pasada a través de una sentencia del Superior Tribunal de Justicia. Justamente, a Barzola se lo llevó como testigo, porque se había comentado que pocas horas antes de ser asesinada Depardón, Pagliaruzza le había disparado con un arma, que se suponía era el mismo que pudo haber utilizado para matar a la uniformada, hiriendo a Pin en una rodilla. Ese proyectil nunca fue extraído y pese a que en un principio hubo consentimiento para extraerlo y la Justicia resolvió en mismo sentido, el hampón optó finalmente por negarse y no se pudo realizar una cirugía compulsiva. Nunca se pudo comparar ese proyectil con el que mató a la agente de policía, pero anoche algunos investigadores se preguntaban si se podrá admitir como nueva prueba. (Fuente: El Diario)
Lo más visto
01
02
03
04
05
¿Que pensás sobre esto?
600
 caracteres restantes
Publicar comentarios en INFORME DIGITAL implica la aceptación plena de nuestro reglamento.
Comentarios
¡Tu comentario se ha enviado con éxito!
La aprobación del mismo dependerá de su aprobación por parte del moderador. Muchas gracias.
LIBERTAD PRODUCTORA
Santa Fe 322 Piso 8 Dto.A.
Paraná, Entre Ríos.
Tel: +54 343 4233381
[email protected]

Copyright 2002 INFORME DIGITAL | Todos los derechos reservados | Mediakit: Publicite con nosotros.
[email protected]
Aplicabbs | Diseño: Kembo Dupla Creativa