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Diario UNO).- El caudal de agua que está recibiendo el embalse de Salto Grande en los últimos días, alcanza únicamente para hacer funcionar dos de las 14 turbinas del complejo hidroeléctrico, al tiempo que no se prevén lluvias a corto plazo en toda la cuenca del Río Uruguay de acuerdo a los informes meteorológicos para la región. El nivel del embalse ha descendido a los 33 metros con 60 centímetros y se mantiene así desde mediados de abril marcando, además, uno de los registros de producción energética mas bajo en la represa para la época en toda su historia. El aporte del Río Uruguay, que es del orden de los 550 metros cúbicos por segundo, no permite a los técnicos retener el agua en el embalse porque dado que ese volumen es el caudal mínimo que la represa debe evacuar para alimentar de agua potable a las poblaciones en el litoral de Uruguay y Argentina. El déficit hídrico del Río Uruguay se puede apreciar en las costas aguas abajo de la represa, zonas en las cuales las aguas se han retirado centenares de metros y ha quedado el lecho rocoso al descubierto. Con estos valores hídricos Salto Grande no supera la producción de 3.200 megavatios por hora y para poder hacerlo tendría que recurrir a la utilización de las escasas reservas, explicaron a El País en la Comisión Técnica Mixta. Allí se informó que la Administración Nacional de Usinas y Transmisiones Eléctricas (UTE) ya comenzó a comprar a la represa de Yaciretá de Argentina, 4.500 megavatios por hora de energía para atender la demanda de Uruguay sin tener que recurrir a poner en marcha centrales alimentadas a fuel oil.