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n innovador tratamiento de células madre para la ampliación “natural” de los pechos será ofrecido por primera vez en mayo a las mujeres europeas. Se trata de un procedimiento de extracción de células madre de grasas del estómago o los muslos, para implantarlos en los pechos femeninos y lograr que éstos crezcan naturalmente. Este método es una derivación hacia el campo de la estética de los procesos que utilizan los científicos británicos en la terapia con células madre para reparar tejidos mamarios dañados en pacientes con cáncer de pecho. Kefah Mokbel, cirujano del London Breast Institute, a cargo del proyecto, tratará con este método a diez pacientes en el Hospital Princess Grace, a partir de mayo. El especialista adelantó que, en los próximos seis meses, las pacientes podrán acceder al tratamiento pagando alrededor de 9.300 dólares. El médico explicó que “éste es un avance muy importante en la cirugía de pecho” ya que “los tratados con células madre se sienten más naturales porque el tejido mamario es tan delicado como el resto de la zona. Los implantes son objetos alienantes y están asociados con complicaciones a largo plazo. Además tienen que ser reemplazados. También pueden perder y provocar infecciones”, agregó. Mokbel aclaró que “aunque la técnica de células madre puede mejorar el volumen, no proveerá de firmeza ni creará pechos con formas específicas”. Dónde y cómo La técnica ya es utilizada en Japón con fines estéticos. Por el momento, en Europa, el tratamiento se realizará en un centro médico privado londinense cuyo nombre aún no se dio a conocer. Sí se supo, según publicó el periódico The Sunday Time, que la promoción será muy fuerte y estará basada en una comparación con los implantes de siliconas. “Es tejido propio con tacto más natural y, en principio, tiene menos contraindicaciones”, advirtió Mokbel. Fiebre por las lolas El mes pasado se lanzó, en Inglaterra, Macrolane, una sustancia cosmética a base de ácido hialurónico. Según el laboratorio que investigó el compuesto durante siete años, basta una inyección del gel para aumentar el busto en una talla de corpiño sin alterar la forma original de los pechos. “La piel está formada en un 40% por ácido hialurónico, que es lo que provee el relleno dentro de la estructura natural del colágeno”, explicó Christopher Inglefield, cirujano plástico del London Bridge Hospital. El tratamiento sólo lleva entre 30 y 90 minutos –ideal para hacerlo en el horario del almuerzo– y dura entre 12 y 18 meses. Los cirujanos plásticos, obviamente, en su mayoría desconfían de su efectividad: “La mejora es sutil. Mi idea es que si uno les dice a sus pacientes que se ven fantásticas, ellas se van a sentir fantásticas. Pero es sólo un tratamiento de belleza en una industria que quiere hacer dinero todo el tiempo, en definitiva un tratamiento en el que a los 12 meses desaparece todo”, opinó Chris Caddy, miembro de la British Association of Plastic, Reconstructive and Aesthetic Surgeons. (Crítica Digital)