L
a Ley Nacional de Salud Sexual y Reproductiva está en vigencia hace cuarto años. Establece la información y provisión gratuita de métodos anticonceptivos en centros de salud y hospitales. El programa es nacional y hace varios meses suspendió el envío a las provincias de anticonceptivos orales. Hoy ya no queda stock para entregarles a las mujeres que se atienden en hospitales y centros de salud, por lo que los profesionales apelan a otros métodos alternativos. Según informó Mónica Fassoni, jefa del Área de Salud Sexual y Reproductiva dependiente de la Secretaría de Salud de la provincia el último mes que llegaron los anticonceptivos orales fue en diciembre. “Había stock hasta el 31 de enero y desde esa fecha en adelante no se consiguieron más pastillas”. La profesional indicó que por mes llegaban 30.000 cajas de pastillas, de las cuales aproximadamente un 20% quedaba en Paraná. Hoy los centros de salud ocupan parte de su presupuesto en comprar algunas cajas o directamente apelan a otros métodos como la inyección (siempre y cuando la mujer la tolere) o el Dispositivo Intrauterino (DIU). Metodología Se entregan anticonceptivos en más de 400 centros de salud y hospitales de Entre Ríos. Fassoni indicó que día a día crece el número de mujeres que solicitan pastillas. La Secretaría de Salud abastece a los centros de salud con anticonceptivos hormonales orales e inyectables combinados y especiales, preservativos y dispositivos intrauterinos (DIU). La entrega se efectúa cada tres meses. Los métodos más solicitados son en primer lugar los anticonceptivos hormonales combinados (pastillas); le siguen los inyectables. En tercer lugar se ubican los preservativos. También efectúan la entrega de anticonceptivos especiales (una pastilla con una sola hormona) para la mujer que está amamantando a su hijo. “Estas pastillas están disponibles. El único problema que tenemos es la entrega de las pastillas”, aclaró Fassoni y descartó que haya mujeres en riesgo de embarazo, ya que los profesionales en cada centro están trabajando con otros métodos alternativos para dar respuestas a la demanda de las mujeres. El requisito fundamental para la entrega es el paso por la consejería. Se trata de un área especial donde un profesional capacitado (médico, enfermeras, agentes sanitarios) informa sobre todos los métodos disponibles, incluido los naturales. También se habla sobre las condiciones sexuales de cada pareja, los pro y contra, ventajas y desventajas de cada anticonceptivo. “No hay otro requisito para la entrega. No importa si la mujer tiene o no dinero para comprar una caja. Cualquier persona puede buscar los anticonceptivos en los hospitales” El objetivo es eliminar barreras de accesibilidad. Incluso en el centro de salud en zonas rurales. “Aquí todavía hay stock para la gente que busca”, contó Fassoni. Demoras en el Puerto En el Puerto de Buenos Aires hay dos containeres con casi un millón de blister de pastillas. Fuentes del Ministerio de Salud adjudican la discontinuidad en la entrega a un problema con esa compra: el laboratorio extranjero que ganó la licitación internacional se habría demorado con el pedido y cuando llegaron los container quedaron varados por una disputa con la empresa vendedora por el pago de los impuestos de importación. Aunque finalmente pagó el gobierno argentino, las pastillas hasta ayer seguían en el Puerto. Y todavía debe controlar su calidad la Anmat (la agencia gubernamental que controla los medicamentos), antes de que puedan empezar a distribuirse. Hoy las más perjudicadas son las mujeres de menores recursos, que no tienen dinero para comprar las pastillas. Sin embargo Fassoni aclaró que no corren el riesgo de quedar embarazadas En algunas provincias como Córdoba, Mendoza y Santa Fe, los gobiernos locales salieron a enfrentar la crisis a través de compras directas de insumos. “Entre Ríos también estaría abocado a esa compra”, destacó. (Fuente: Uno)