C

onfederaciones Rurales, Federación Agraria, Sociedad Rural y Coninagro denunciaron que las medidas anunciadas por Lousteau le quitarán al campo unos 2.400 millones de dólares. “Las entidades nos declaramos en estado de asamblea permanente y convocamos a los productores argentinos a que no comercialicen productos del campo durante jueves y viernes”, señalaron las cuatro organizaciones rurales en un comunicado. El titular de CRA, Mario Llambías, criticó la política que se viene llevando a cabo desde el gobierno hacia el campo y señaló: “Vemos que día a día complica más el futuro de los argentinos”. “Cuando pedimos participar no lo hacemos pensando sólo en el productor agropecuario sino en nuestro país que tiene gran oportunidad de crecer y desarrrollarse y vemos que es posibilidad se va achicando”, sostuvo el titular de CRA. Llambías dijo que en el campo están “convencidos de que hace muy tiempo colaboramos con otros sectores en sacar al país de una gran crisis”. “El interior nuevamente está siendo despojado desde los 2.400 millones de dólares, donde se tralada esto en parte a las arcas fiscales y en parte a otros sectores de las cadenas, y nuestras provincias productoras tamién se ven afectadas por este tipo de medidas”, afirmó el dirigente. “UN PAPAGAYO”. Por su parte, el titular de la Federación Agraria, Eduardo Buzzi, fue muy duro con el ministro de Economía, a quien acusó de desconocer la situación del campo y de tomar medidas que “hacen todo más complejo”. “Lousteau está lejos de entender de qué se habla y sólo repite como un papagayo las indicaciones que le dan y que no se de donde las saca”, disparó Buzzi en la conferencia de prensa. Además, rechazó uno de los argumentos utilizados por el titular del Palacio de Hacienda para imponer las retenciones móviles, el de evitar que se profundice el proceso de “sojización” que atraviesa el país. “El ministro no sabe bien de qué habla, se cree que con medidas fiscalistas va a decir qué es lo que se debe producir, cuando lo que faltan son políticas activas”, enfatizó Buzzi. POSICIÓN DE LA SRA. Luciano Miguens, de Sociedad Rural, una entidad que por lo general suele ser más conciliadora, dijo que las medidas del Gobierno “preocupan porque se anuncian justo en un momento en que estábamos tratando de encontrar un diálogo”. “Sólo queremos aprovechar los favorables precios internacionales, sin afectar el mercado interno, pero estamos perdiendo una oportunidad histórica y si la dejamos pasar será realmente un suicidio”, sostuvo el dirigente. En tanto que Fernando Gioino, titular de Coninagro, señaló que “no podemos creer lo que está pasando, esperemos que en estas 48 horas el Gobierno reflexione y nos de participación”. “Sólo esperamos como productores ser partícipes de las resoluciones que se toman”, sostuvo el directivo. Las cuatro entidades señalaron que “la construcción de un país en serio requiere del desarrollo equilibrado de todo el interior, que no debe ser nuevamente víctima de erróneas medidas que impidan sus posibilidades de crecimiento”.