E
l joven tenía 20 años cuando fue detenido por efectivos de la comisaría quinta y nunca más se supo de él. El caso motivó en la Sala I de la Cámara del Crimen que el personal de la comisaría fuese apartado del caso y la investigación la realizara Gendarmería. Los agentes fueron identificados conduciendo el móvil 97 de la comisaría y lo llevaron detenido sin motivos aparentes. En el arresto, un policía le habría pegado un culatazo en la nuca con su Itaka.