L
ejos del duro mensaje que le dedicó Cristina Fernández de Kirchner a Tabaré Vázquez durante su discurso de asunción el pasado 10 de diciembre, el conflicto en torno a Botnia no irrumpió en la cumbre en Montevideo, donde los mandatarios intercambiaron algunas señales de distensión. “Es para mí muy grato transferir la presidencia pro témpore del Mercosur a la hermana República de la Argentina en la persona de su presidenta Cristina Fernández de Kirchner", expresó el mandatario uruguayo. Vázquez hizo hincapié en "las tradiciones y proyectos" comunes entre ambos países y expresó que era "muy grato" hacer el traspaso en Uruguay "por todo lo que une" a ambos países. Además, en dos oportunidades felicitó a Fernández de Kirchner por haber asumido la presidencia de la Argentina. "Estoy seguro que lo hará con convicción, con dedicación, con responsabilidad y con pasión", afirmó. Al hacer el traspaso, aclaró en tono distendido: "Aquí no hay bastón, hay un modesto martillo", en referencia a la reciente asunción de Cristina Kirchner como jefa del Estado en la Argentina. “Quiero decirle q esta usted en su casa. Nos alegra enormemente que nos visite”, expresó. "Me he sentido en mi casa, porque es mi casa Uruguay como la República Argentina es la casa de miles de uruguayos que desde hace mucho tiempo viven con nosotros", le respondió Fernández, al tiempo que agradeció al presidente oriental y a todo el pueblo uruguayo el cariño y el afecto recibido. Discursos. El presidente uruguayo evitó referencias directas a Botnia durante su discurso inaugural. Sí mencionó los problemas que existen en el bloque respecto a la libre circulación de bienes, entre otras demandas, aunque sin menciones directas los cortes de ruta. A su turno, la presidenta Fernández de Kirchner tampoco hizo referencias al conflicto. Esta vez, la polémica por la valija cobró el protagonismo que solía tener el diferendo por Botnia en otros encuentros de presidentes.