E
l juez de la causa por el triple crimen, Maximiliano Benítez, descartó esta mañana el móvil de un robo y de inmediato se dispararon diversas hipótesis. Ocurre que, tras tomarle declaraciones a un hijo extramatrimonial del funcionario judicial asesinado, trascendió que el juez lo posicionó como el principal sospechoso del triple crimen. Las sospechas se consolidaron con el resultado de dos pruebas científicas. La primera es un dermotest y la otra surge de un entrecruzamiento de llamados del celular del chico de 17 años. Trascendió que desde allí habría enviado varios mensajes de texto a María Taleb, una de las víctimas de la matanza, amenzándola de muerte. Sin embargo Matias se justificó sobre la polvora en sus manos y contó que el sábado a la tarde había estado tirando con un “rifle calibre 22 a unos loros que no lo dejaban dormir” y que, eso fue mientras estaba en la chacra con el padre. Por otra parte, el jefe policial de Entre Ríos, Miguel Massuh, confirmó además que los cuerpos de Miguel Bressán, su esposa y su hijo de un año y ocho meses fueron hallados en el patio y tenían varios disparos de armas de fuego. Los disparos fueron realizados por una pistola 9 milímetros y trascendió que días antes, el hijo de Bressán intentó empadronar un arma con esas características. Todavía se investiga si el adolescente es quien protagonizó una discusión que habría acontecido dentro de la casa antes de los disparos fatales. (Infobae)