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a Asociación Cooperadora del Hospital Behring, de Ibicuy, en el departamento Islas, reclamó con urgencia al ministro de Salud de la Nación, Ginés González García, y al ministro de Salud y Acción Social de Entre Ríos, Gustavo Bordet, por la crítica situación sanitaria que se vive a raíz de la falta de profesionales médicos en el nosocomio, agravada ayer tras la renuncia de la directora, Gabriela Ojeda. Mediante sendas cartas documento, la entidad se dirigió a la Nación y a la provincia pidiendo “la inmediata intervención”, por cuanto “si ocurre cualquier accidente o cuestión seria a una persona, no sólo no podrá ser debidamente atendida sino que tampoco podrá ser derivada por no existir autoridad en el hospital”. “Es de hacer notar que el pueblo de Ibicuy se ha autoconvocado para realizar las medidas que crea conveniente, esto es tomando el hospital, poniendo esta situación en conocimiento de las autoridades nacionales, de los medios de comunicación nacionales y provinciales, iniciando acciones penales por abandono de persona contra las autoridades provinciales”, enumera el texto, que firman el presidente, José Coraggio; la secretaria, Nilda de Pires, y la tesorera, María Velásquez. A la vez resaltan la necesidad de solucionar el problema de fondo y no parcialmente, y ello significa nombrar “los tres médicos en planta permanente, cubrir las guardias de los siete días de la semana por medio de contratos aprobados de inmediato; el nombramiento en planta de dos enfermeras y de una lavandera. Y esa solución no puede ser demorada ni una hora más, ya que tal demora puede costar la vida de un ser humano”. ESCENARIO El secretario de Salud de la provincia, Mario Elizalde, reconoció que existe un importante déficit en materia de recursos humanos en el hospital de Ibicuy. El problema, aseveró, se viene atendiendo desde hace más de un mes, y consideró “absolutamente lógicos” los requerimientos de la comunidad. “Hemos arrimado distintas soluciones a los problemas planteados y otras soluciones faltan”, explicó. El conflicto más severo se genera ahora por la falta de recursos humanos, en especial de profesionales médicos. “Pudimos obtener tres puestos de enfermeras y uno de lavandera, pero nos falta cubrir médicos, donde hay una verdadera dificultad para encontrar gente que decida ir a trabajar a la zona de Ibicuy”, admitió Elizalde. De todos modos, adelantó que “el tema lo tenemos prácticamente solucionado”, por lo que “en este momento el director de Atención Médica está terminando de compaginar la cantidad de médicos que van a ir a trabajar allá”. Pero ayer, el problema se agravó luego de la renuncia de la directora del hospital. En declaraciones a la prensa, la directora del hospital, Gabriela Ojeda, había señalado esta dificultad y destacó que se está trabajando “en condiciones infrahumanas”. También dijo que “todo lo que hay en el hospital es gracias a la gente que ha donado, sin pedir subsidios de la provincia”. La comunidad de Ibicuy había solicitado al Gobierno que dos médicos se instalarán en la zona. “Eso es muy difícil de conseguir, porque no es ni siquiera una cuestión económica la que plantea la persona que decide instalarse allí, es una cuestión de decisión de vida”, precisó el funcionario. Pero el abogado José Coraggio, presidente de la cooperadora del Hospital de Ibicuy, cuestionó la falta de cumplimiento de lo prometido por Elizalde durante una asamblea de vecinos el 4 de junio último. “Elizalde firmó un acta, y se comprometió a que en un plazo de 48 horas enviaba tres médicos, enfermeras y lavanderas. De todo lo que prometió, no se cumplió nada. Sólo promesas”, aseguró. (El Diario)