S
egún fuentes de la Asamblea de Gualeguaychú, el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, habría prometido no activar el dragado del curso fluvial hasta tanto no termine el diferendo con el vecino país. En la otra vereda, funcionarios uruguayos -entre ellos, el subsecretario de Medio Ambiente, Jaime Igorra- alertaron que el verdadero trasfondo del conflicto binacional es la «lucha por los puertos». En este marco, trascendió que el gobierno de Tabaré Vázquez estaría dispuesto a hacerse cargo del costo del dragado que le correspondería a la Argentina. Mientras tanto, varias reparticiones uruguayas -el Ministerio de Transporte y Obras Públicas, la Administración Nacional de Puertos (ANP), la delegación ante la Comisión Administradora del Río Uruguay (CARU), Hidrografía y ANCAP- estudian mejorar la navegabilidad del río Uruguay entre las localidades de Nueva Palmira y Paysandú, pasando por Fray Bentos, lugar donde se ubica la planta de Botnia. También prevén dragados desde Nueva Palmira hacia el océano Atlántico pasando por el canal Martín García, por el Río de la Plata Los cambios que impulsa el país vecino se deben a que, en la situación actual, los buques uruguayos que transportan combustible no podrían navegar por el río compartido en la zona de influencia de Botnia. (Fuente: Ambito Financiero)