O
beid dispuso que la investigación sea realizada por la Dirección de Asuntos Internos de la Policía y, paralelamente, ordenó los cambios de jefes en cuatro unidades regionales y 15 comisarías rosarinas, según informaron fuentes gubernamentales. La decisión está relacionada con las denuncias públicas que efectuó la jueza federal Laura Cosidoy, en las cuales dijo que existiría una connivencia de policías con narcotraficantes que operan en esta provincia, especialmente en el sur santafesino. Por otra parte, el gobernador ordenó la rotación de jefes en cuatro de las 19 unidades regionales de esta provincia. En 2006, la jueza Cosidoy hizo público el nombre de al menos dos discotecas de Rosario donde se comercializaban drogas ante la presencia policial. Hace menos de un mes, la magistrada sostuvo que el jefe de la ex división de Drogas Peligrosas en Rosario, comisario Aldo Monzón (luego pasado a disponibilidad), se encargaba personalmente de ir a los sitios de diversión para recibir dinero a cambio de no reprimir la venta de drogas. Antecedente En esa oportunidad, el gobierno provincial resolvió remover de sus cargos a 35 uniformados de la delegación Rosario de la ex Dirección de Drogas Peligrosas. El secretario de Gobierno de Santa Fe, Walter Gálvez, aseguró que el gobierno provincial cuenta «con importante información reservada» respecto de la denuncia realizada por la magistrada, en muchos casos proveniente de llamados anónimos. Gálvez defendió los cambios realizados por el gobernador Obeid, pero dijo que estas modificaciones comenzaron a principios de este año «con el relevo del jefe de policía de la provincia y, luego, de los titulares de 90 por ciento de las unidades regionales departamentales».