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lgunas estaciones de bandera blanca, con contratos de provisión con las petroleras, de Córdoba, Buenos Aires y Santa Fe ya han incrementando los valores ante el congelamiento de las tarifas desde 2004. En la nuestra, la Cámara que nuclea al sector espera mayor certidumbre legal al tiempo que asegura que las 180 empresas están en “situación crítica y de quebranto”. Desde la semana pasada, muchas estaciones de servicio de las provincias de la Pampa Húmeda incrementaron entre 5 y 15 centavos el precio del litro del gasoil al incorporar a la carga el costo de una categoría que funciona como un eufemismo, ante la negativa de la Nación de descongelar las tarifas, pero que impacta directamente sobre el valor del surtidor: “servicio de playa”. El nivel de ahogo financiero que vienen denunciando las empresas las llevó a buscar este atajo, justo cuando en la región se produce el pico de la cosecha. En Entre Ríos, según advierten desde la Cámara de Estaciones de Servicio, la situación no es diferente, pero esperan mayor certidumbre legal para implementar la medida, ya que en Corrientes se presentó un recurso judicial y se impidió la implementación de la medida. A pesar de haberse informado desde algunos medios nacionales, el plus aún no se aplica en nuestra provincia. Sin embargo, el titular de la entidad, Oscar González, aseguró ayer a EL DIARIO que la situación ya es insostenible. “No tengo noticias que alguna estación lo esté aplicando, pero tenemos de intenciones que antes de fines de mes las estaciones de también lo apliquen”. “En algunas provincias ya implementaron el aumento con el servicio de playa. Se trata de una medida voluntaria e individual de cada estación, pero el problema nos afecta a todos por igual, excepto a las que son propias de las petroleras. Esto el Gobierno (nacional) lo sabe, y tiene muy claro que ya no se puede trabajar con costos y márgenes de 2004 promediando 2007, sin poder tocar el precio de los combustibles. No hay empresa que aguante, se perdió toda rentabilidad, la mayoría de las estaciones trabaja a pérdida, y estamos atrapados entre el Gobierno y las petroleras”, describió González. Aunque no son optimistas, los empresarios entrerrianos esperarán los resultados que arrojará el encuentro entre el sector y el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, quien reconoció la situación y entendió que se requiere “una solución estructural”, aunque “ya tuvimos 10 reuniones y no pasó nada. No espero que de ésta tampoco salga algo, aunque sólo nos queda la esperanza”, aseguró el empresario paranaense. SITUACIÓN El escenario, visto con los ojos del surtidor, se compone de las siguientes variables. El Gobierno congeló los precios de los combustibles, que, sumado a la escasa oferta existente para las estaciones de bandera blanca —que no son de las petroleras ni funcionan bajo su licencia— no siempre es fluida y muchos días al mes se quedan sin combustibles, ya que los insumos y costos han experimentado comportamientos alcistas, la situación financiera es “crítica, desesperante y todas las estaciones trabajamos a pérdida”. González argumenta que “los precios son de 2003, y todos los costos han subido todos. En 2004 un empleado de estaciones de servicio ganaba 420 pesos y hoy su salario se elevó a 1300, más adicionales. Yo gano lo mismo, y tampoco puedo crecer en volumen, aún si quisiera”. Es que con los precios fijos y el cupo impuesto desde las petroleras, el margen es nulo. Es por eso que aseguran que el aumento es inminente, caso contrario habrá un quiebre masivo de empresas, como lo vienen denunciando los dos grandes nucleamientos nacionales del sector. Se estima que el gasoil, principal perjudicado, vería incrementado su costo en unos 15 centavos —hoy se ubica en 1,60 $ el litro—, ya que entiende que esto los coloca “en el punto de equilibrio, y habría que empezar en ver cómo recuperamos rentabilidad”. El aumento rondaría el 6 ó 7 %, según estimaciones. En conversaciones con algunas de las 180 estaciones que existen hoy en Entre Ríos se advierte el nerviosismo y la ansiedad, algunas por la falta de provisión y casi todas por el retraso en los precios, y a decir de González, aún no se aplicó el aumento de “servicio de playa porque estamos viendo los aspectos legales y técnicos que tiene este problema, porque asumimos que es una medida poco popular, y como Cámara tenemos la responsabilidad de transmitir fehacientemente eso. No queremos tener los problemas legales que se dieron en Corrientes, pero algunas estaciones ya tienen preparados los carteles informando que se cobrará el servicio de playa”, describió el titular de la entidad. Este servicio es por los mayores costos que dicen los empresarios tener, y como en el laudo de los restaurantes, fija el costo operativo de usar el complejo. “No podemos cubrir este costo. Sólo nos queda cerrar”, advirtieron.