E

l presidente del CGE, Jorge Kerz, informó que esta norma prevé diferentes modelos de funcionamientos que serán adaptados a los contextos de la provincia, incluyendo zonas rurales dispersas, asentamientos rurales y zona de islas. Esta propuesta se pondrá en marcha la próxima semana, dando respuesta a la necesidad tan esperada por padres, alumnos, vecinos y docentes de la zona rural. La estructura organizativa que se define para éste ámbito son cuatro: 1) EGB III con agrupamientos rurales, 2) Pluriaños, 3) Alternancia y 4) Itinerancia. Cualquiera de estos cuatro modelos organizativos garantiza el acceso de las mismas posibilidades educativas que las que se brindan en las zonas urbanas y con la calidad de aprendizajes que atiendan a sus necesidades, expectativas y un vínculo constante con sus pares, con los docentes y otros actores de la comunidad. La propuesta se fundamenta en la decisión del Gobierno provincial, que defendió en el marco del Consejo Federal de Educación que la educación en el ámbito rural sea considerada y definida como modalidad, para poder estructurar distintas formas de organización escolar, ampliando las posibilidades de la educación pública provincial como factor clave para la formación integral, la inclusión social, la democratización de la cultura y la consolidación de la identidad. Además, el director de Educación Media y Polimodal, Sergio Altamirano, destacó la necesidad de garantizar la igualdad de oportunidades en el ingreso, permanencia y egreso para todos los alumnos que transitan por el sistema educativo tanto del ámbito urbano como en el ámbito rural - niñas, niños, adolescentes, jóvenes, adultos privilegiando los sectores más vulnerables con activas políticas de recuperación, reinserción e inclusión, en un clima de aceptación de la diversidad. Altamirano insistió con que esta propuesta educativa fortalece los niveles de participación de todos los miembros de la comunidad porque la educación compromete a todos los sectores sociales y revalorizar la escuela como espacio central del sistema educativo, buscando la progresiva autonomía de las instituciones, sin perder el aspecto integrador y regulador del sistema, en función de valores para la formación integral de los alumnos de todos los niveles y modalidades, del desarrollo progresivo de sus capacidades y su inserción social.