U
n dramático episodio conmocionó ayer de tarde a la ciudad de Diamante, cuando tras un desesperado llamado telefónico, una mujer que concurría a la finca de dos mujeres —madre e hija— que viven solas, se encontró con un cuadro más que macabro. Una de ellas, de 48 años, que desde tiempo atrás cuando sufrió un accidente cerebro vascular se halla postrada en una cama, estaba brutalmente golpeada y bañada en sangre, aunque aún con vida. A pocos metros, dentro del baño y en el piso, la madre de la anterior, una señora de 78 años, también en medio de un charco de sangre, con una profusa hemorragia tras haberse intentado matar cortándose las venas, según detallaron las fuentes policiales consultadas. La mujer que las encontró, una señora de 37 años que solía cuidarlas en horas de la tarde, logró pedir auxilio y tras unos breves minutos, madre e hija fueron trasladadas a diferentes centros asistenciales donde fueron atendidas, siendo extremadamente grave la situación de la menor de las mujeres. El hecho, que se habría producido en las primeras horas de la tarde y que fue descubierto por la mujer que asiduamente llegaba a atenderlas, tuvo como escenario una finca de calle 25 de Mayo de Diamante, donde vivían juntas hasta ayer Raquel Villarraza, de 78 años, y su hija Mónica Quinteros, de 48. Esta última no podía desplazarse normalmente debido a que había sufrido un accidente cerebro vascular que la obligaba a mantenerse postrada. Posiblemente agobiada por la situación y supuestamente en medio de una crisis emocional, la septuagenaria decidió terminar con la vida de su hija y luego matarse, sin llegar a consumar ninguno de los dos actos, pese a que le ocasionó gravísimas lesiones a Mónica Quinteros, por lo que anoche la víctima estaba siendo intervenida quirúrgicamente, según dijeron las fuentes policiales con las que tomó contacto EL DIARIO. Un familiar de ambas que llegó poco después a la casa, al ser anoticiado de lo ocurrido, le mencionó a la Policía que encontró una nota que habría sido escrita por la mujer mayor, la que estaba destinada a ser entregada al juez de esa jurisdicción y donde aparentemente se explicarían los motivos de su dramática decisión. En el lugar fueron secuestrados un cuchillo y una herramienta con la cual la septuagenaria habría efectuado los golpes contra el cuerpo de su propia hija indefensa. La causa se caratuló como Tentativa de Homicidio seguida de Tentativa de Suicidio. Mientras Mónica Quinteros quedó internada en una clínica privada, la causante fue internada en el hospital zonal de Diamante, bajo custodia permanente. (Fuente: El Diario)