T
ras la asamblea que se realizó en la tarde del viernes en el Municipio de Villa Paranacito, los pescadores del departamento Islas decidieron suspender el corte de ruta que tenían previsto realizar este fin de semana. La decisión la tomaron luego del encuentro que mantuvieron con el director de Fiscalización de Entre Ríos, Jorge Florean, quien se habría comprometido a elevar el cupo de extracciones de pescado del río Uruguay. El reclamo surgió desde la implementación de la veda, dispuesta por la Provincia a raíz de la crisis pesquera. Sin embargo, los pescadores isleños, denunciaron que se dispuso de una medida sin haber consensuado con la República Oriental del Uruguay (ROU). Es que mientras del lado argentino, se estableció que cada pescador podía extraer por día 100 piezas, en el vecino país, no existen límites de cantidad ni de tamaño, denunció a INFORME el trabajador Marcelo Hoftatter. Otras de las propuestas que se barajó en la asamblea, es que desde el Municipio conjuntamente con la Provincia y la Nación se implementen proyectos de microemprendimientos para las familias de pescadores. “Hay que lograr que el pescado tenga valor agregado. La idea es que de los microemprendimientos surja, por ejemplo, que las piezas salgan fileteadas” o también crear invernaderos, comentó el senador Eduardo Melchiori, quien participó del encuentro con los trabajadores. Entre las propuestas que se están evaluando por estas horas, es que para lograr una reconversión del sector pesquero y evitar la depredación, se quieren crear invernaderos de sábalos. “Los pescadores son aliados de las medidas que se dispongan para preservar el recurso, pero no están dispuestos a que se tomen medidas ambiguas o que los perjudique, porque ellos subsisten de este trabajo”, indicó la jefa comunal Carmen Toller. Asimismo, se indicó que los pescadores solicitan que mientras exista la emergencia ictícola, no se otorguen nuevos carnés y se priorice, a los “lugareños”, ya que por la escasez de pescados en el Paraná, muchos pescadores se trasladaron para trabajar al río Uruguay. En cuanto a la realidad socioeconómica de Villa Paranacito, la jefe comunal indicó que desde el cierre de los aserraderos, muchas familias se volcaron a la pesca para subsistir. “Acá había 34 aserraderos en 1983 y en la actualidad quedaron sólo dos. Las personas que trabajan en la madera, debieron salir a pescar para ganarse la vida”, detalló la intendenta. “La madera no tiene valor agregado y ante el cierre de los aserraderos, hubo un masivo éxodo de la gente rural a la planta urbana. Es por eso que ahora estamos firmando un convenio con el Conicet para que se puedan construir viviendas con nuestra materia prima que es la madera, cuya demanda es cada vez más importante, porque al no haber trabajo, muchas familias no pueden acceder a los planes del IAPV”, destacó. Es así, que la idea es poner en marcha un plan de construcción de viviendas con las materias primas de la zona. “Como prueba se construyeron 10 casas y ahora se hará un curso, que va a dictar el Conicet para implementar este programa”. (Fuente: El Diario)