E
l médico clínico Roberto Lescano admitió haber atendido a un vecino de esta ciudad con un cuadro que despertó las sospechas. Además, dijo que el paciente estuvo recientemente en el norte del país, en la frontera con Paraguay, donde 2.200 personas se han contagiado el virus que transmite el mosquito Aedes aegypti. También aclaró que esa persona se encuentra bien y cumpliendo con las recomendaciones que le impartió. Al tomar contacto con el paciente, Lescano ordenó de inmediato que se hicieran análisis en Buenos Aires, vía un laboratorio de Concepción del Uruguay, para determinar si es posible que el vecino haya contraído la enfermedad. “Hay sospechas, pero no se puede decir que hay dengue”, afirmó el médico a FM Riel de Basavilbaso. El profesional aclaró que existen cuatro serotipos del virus del dengue (DEM 1, DEM 2, DEM 3 y DEM 4), siendo el DEM 1 el menos agresivo y el que produce el cuadro clínico habitual; mientras que las otras clases pueden evolucionar hacia cuadros más severos como por ejemplo hemorrágicos. “La persona estuvo en el área del norte argentino y sur paraguayo donde, y según las informaciones publicadas en los medios de comunicación, son más de 2.000 casos y medio centenar los afectados que se encuentran hospitalizados. La situación provocó que el ministro de Salud Ginés González García viajara al Paraguay para coordinar las acciones porque la epidemia dejó de ser focalizada. En esa zona todos los años hay dengue, pero nunca en un área tan grande”, dijo el médico. “Existe un alerta sanitaria que hace que los profesionales de la salud, ante determinados cuadros de los pacientes, tengamos que tener en mente la posibilidad de la enfermedad”, agregó. Días pasados, la Dirección de Epidemiología de la Provincia había aclarado que el virus no se encuentra en territorio entrerriano, y que la única forma de que se produzca algún caso es por el tránsito de personas desde las provincias o países limítrofes donde ha proliferado el dengue. También se insistió en mantener las medidas precautorias, como deshacerse de los recipientes que suelen acumular agua, como macetas y neumáticos, y utilizar repelentes para evitar las picaduras de mosquitos.