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a fiscal de Estado, Claudia Mizawak, dijo que las gestiones realizadas fueron “doblemente satisfactorias, porque se logró recuperar el dinero y se evitó la sede judicial”, logrando un acuerdo de partes. “Esta retención –hecha cuando el Crédit Agricole controlaba el banco– se hacía en virtud de un convenio de fideicomiso, por el que el Bersa Fiduciario retenía una porción de recursos de coparticipación federal de impuestos”, explicó Mizawak. Agregó que los fondos excedentes debían ser restituidos a la Provincia en un plazo de 24 horas, pero a mayo de 2002 “se acumularon fondos retenidos que el Bersa debía devolver por un importe de 6,4 millones de pesos”. “La gestión de Montiel nunca los reclamó, dilatándose la devolución, que luego se volvió prácticamente imposible a raíz de la caída del Bersa y posterior declaración de quiebra del Bersa Residual”, apuntó. Los 7,4 millones ingresados el jueves, corresponden al monto de aquella deuda más los intereses correspondientes. Hubo varias gestiones antes de que el banco hiciera una propuesta concreta. Después se firmó un convenio con la autorización por decreto del Ejecutivo, para que el dinero finalmente sea transferido.