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��A eso apuntamos, para eso estamos trabajando”, aseguraron. En algunas zonas de la provincia, sin embargo, el control deberá ser muy estricto. Por eso, el sistema de vigilancia epidemiológica es fundamental. La “explosión” de la garrapata, hace unos años, causó alarma entre los productores pecuarios entrerrianos porque significó un enorme retroceso para la ganadería de la provincia. Ahora, sin embargo, algunos números permiten mirar el futuro con cierto optimismo. Así, al menos, lo consideran en la Fucofa (Fundación contra la Fiebre la Aftosa), la entidad que tiene a su cargo la lucha contra el parásito, cuyos directivos estiman que en 2008 nuestra provincia podría volver a ser libre de garrapata. José Carlos Kornschuh, presidente de la Fucofa; Jorge Ruiz, secretario; Gabriel Simonato, tesorero; y Ricardo Burgos, consejero; durante una entrevista con EL DIARIO RURAL, no obstante, aclararon que aquel estatus no quiere decir ausencia total de garrapata, sino que se habla de una incidencia mínima. Técnicamente, precisaron, para ser libre de garrapata “la cantidad de campos afectados no puede superar el 1 % de los establecimientos de la provincia. A eso apuntamos, para eso estamos trabajando”, remarcó Simonato. “Somos conscientes de que hay zonas de la provincia —los departamentos Feliciano, La Paz, Federal y algunos puntos de Federación— que van a tener que seguir siempre con una vigilancia muy activa porque son áreas altamente propicias para el desarrollo de la garrapata y en donde, por sus condiciones naturales, normalmente el control es más difícil”, apuntó Ruiz. Para volver a ser una provincia libre, claro está, es vital poner en práctica un riguroso sistema de vigilancia epidemiológica, sin el cual, obviamente, la garrapata, en cualquier momento, puede ocasionar nuevos “dolores de cabeza” a los productores entrerrianos. (El Diario)