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a deuda pública se ha transformado, con el correr de los años, en una carga de la que pocas provincias logran escapar y que afecta principalmente a los distritos de mayor escala. Buenos Aires es responsable de casi 40% de un pasivo que asciende a más de $ 80.300 millones, tomando en cuenta el conjunto de los distritos, pero también hay distritos pequeños, entre los que se destacan Chaco y Formosa, que poseen grandes pasivos. Esta deuda tuvo una evolución de constante ascenso: pasó de $ 13.921,465 millones (5,1% del PBI de la Argentina) en 1996 a $ 80.393,411 (12,4% del PBI) según la consultora abeceb.com, sobre la base de datos del Ministerio de Economía de la Nación tomados en el primer semestre del año pasado. Devaluación del peso y aplicación del CER son dos variables de peso para explicar este aumento del rojo. Este año, los servicios que deberán pagar las provincias ascienden a $ 13.100 millones (33% más que en 2006). A su vez, la Nación pasó de ser acreedora sobre apenas 1% del total del pasivo en 1999 hasta llegar a 68% en la actualidad. El resultado es un control económico que tiene fuerte gravitación en la faz política, una herramienta muy útil, especialmente en un año electoral. Evolución Al observar la evolución de las provincias sobresale Buenos Aires, a la que la mayor economía del país debía en 1996 $ 3.000 millones, es decir, 1,1% del PBI nacional y 21% del stock total de pasivo provincial, pero ahora adeuda $ 31.106 millones y abarca 4,7% del PBI y 38,7% del stock. El ranking encuentra en segundo lugar a otro distrito «grande»: Córdoba. Sus $ 7.136 millones de deuda en 2006 (en 1996 eran $ 911.890 millones) equivalen a 1,1% del PBI y a 8,8% del stock total. Sorprende luego Chaco, cuya deuda es la tercera del país y alcanza $ 4.178,919 millones. En tanto, distritos pequeños como Formosa ($ 3.275,214 millones) y Entre Ríos (3.004,850 millones) también poseen rojos elevados. Mendoza, otra provincia de escala importante, ocupa el cuarto lugar de la lista, con un pasivo de $ 3.434,188 millones, seguida por Tucumán, con $ 3.369,155 millones. Con buenas performances se encuentran Santa Fe ($ 1.632 millones, equivalente a 0,2% del PBI) y los cuatro distritos mejor posicionados: San Luis, La Pampa, Santiago del Estero y Santa Cruz, con pasivos de $ 165.246 millones, $ 195.182 millones, $ 266.967 millones y $ 351.869 millones, respectivamente. Destacan dentro del total de distritos dos casos particulares, en los cuales el stock de deuda se redujo a lo largo de los últimos 10 años. Se trata de la Ciudad de Buenos Aires, que pasó de $ 2.138 millones en 1996 a $ 2.043 millones en 2006; y Santiago del Estero, que en el mismo período evolucionó de $ 278.493 millones a $ 266.967 millones. (Fuente: Ambito Financiero)