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os principales dirigentes del campo analizarán esta semana si convocan a un nuevo paro agropecuario o si, en su lugar, realizan otra medida de fuerza en protesta por el aumento de las retenciones a las exportaciones de soja. Las respectivas conducciones de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), Sociedad Rural Argentina (SRA), Federación Agraria y Coninagro se reunirán entre hoy y mañana para decidir los próximos pasos y tomar una decisión por consenso, pero fuentes de las cuatro entidades ya hablan de asambleas, cortes de ruta y de un nuevo paro. Incluso hay quienes dicen que ese posible lock out -cese de comercialización de productos- esta vez podría durar hasta 30 días. De convocarse, la nueva huelga ruralista sería la tercera en lo que va de la gestión del presidente Néstor Kirchner. En el último paro, convocado por CRA, FAA y la Rural por las restricciones a las exportaciones de carne y la intervención en los mercados agropecuarios, quedó en evidencia la fuerza del sector: prácticamente no se comercializó ganado y la venta de granos se redujo un 90 por ciento. Al finalizar aquella protesta, que en diciembre pasado se extendió durante nueve días, el sector había prometido un plan de lucha si el Gobierno no respondía a sus reclamos. Pero la suba del 4% de las retenciones al complejo sojero para subsidiar el consumo interno de cereales y oleaginosas profundizó el malestar de los productores. La protesta en análisis podría realizarse entre el 29 de este mes y el 2 de febrero, según fechas que maneja la Federación Agraria Argentina (FAA). Las sociedades rurales de Córdoba, en cambio, prevén una medida de fuerza para mediados de febrero próximo. En estos días, los principales dirigentes ruralistas están finalizando anticipadamente sus vacaciones para avanzar en las conversaciones que comenzaron el mismo viernes que se publicó en el Boletín Oficial la resolución 9/2007. Según esa norma, los derechos de exportación de la soja pasaron de 23,5% a 27,5% para el poroto, y del 20% al 24% para el aceite y la harina. Una vez más, son las confederaciones de asociaciones rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap) y de la Tercera Zona (Cartez) junto con la FAA las entidades más combativas. Pero la Sociedad Rural y Coninagro también estudian la actitud a seguir tras el anuncio oficial que estiró la distancia entre el Gobierno y el agro. Los representantes de las 27 sociedades rurales adheridas a Cartez -de Córdoba, San Luis, La Rioja y Catamarca- dieron ayer el primer paso: decidieron pedir un plan de lucha a los directivos de CRA. "Está la posibilidad de un paro simbólico de una semana o menos, o de un paro contundente si es de dos semanas o más. Queremos llegar a la comunidad con nuestra opinión y vamos a priorizar la unidad del sector", afirmó Ricardo Osella, presidente de Cartez. El dirigente y productor cordobés también arrojó un manto de sospecha sobre el manejo del fondo de US$ 500 millones con el que se subsidiará el consumo doméstico de trigo, maíz, girasol y soja. "Esto habilita cuestiones que tienen que ver con algún tipo de corrupción; además este año habrá campaña electoral y van a hacer falta auspicios", afirmó -elíptico- Osella. "Hay distintas posiciones: desde los más afectados, que plantean 30 días de paro, hasta la organización de algún tipo de movilización sin cesar las actividades. Tenemos que evaluarlo bien, hacer algo bien concreto y prever qué hacemos después del paro. Va a ser un año movidito y en la medida en que se vayan acercando las elecciones va a ser peor", sostuvo Pedro Apaolaza, presidente de Carbap. El secretario gremial de la FAA, Omar Barchetta, confirmó que la entidad está "evaluando varias posibilidades, desde movilizaciones, cortes de ruta y hasta un paro. Queremos acordar con las otras entidades la medida que sea más efectiva, pero si no hay acuerdo la Federación Agraria irá a reclamar sola". Para la FAA es especialmente acuciante la situación de los pequeños y medianos productores que ya vendieron el trigo y no recibirán el beneficio del subsidio pero sí sufrirán el aumento en las retenciones de la soja. "Los productores del norte del país cosecharon hace un mes y vendieron para afrontar costos", explicó Barchetta. En la Rural, hoy se reunirá la comisión directiva y mañana la mesa chica de conducción. "Se va a analizar el aumento de las retenciones, una medida que sorprendió porque se venía trabajando en propuestas alternativas", indicó un vocero de la entidad. En simultáneo se reunirá también la conducción de Coninagro. El presidente de la entidad cooperativista, Fernando Gioino, evitó pronunciarse sobre los pasos que seguirá la institución que, inmersa en la crisis de SanCor, decidió no acompañar a las otras tres entidades en el último paro agropecuario. Horacio Delguy, presidente del Frente Agropecuario Nacional (FAN), otra entidad del sector que tampoco adhirió al último paro, indicó que su institución "también analizará la situación en estos días". (La Nación)