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egún manifestaciones de turistas que se acercan al Palacio de Turismo en busca de información, los mismos expresan su bienestar por la presentación de los cuerpos de paradores que se hallan instalados a los largo de todas las playas, como así también el estado en el cual se presentan estas últimas. “El año pasado vacacionamos en Villa Gessel, y recorrimos muchas localidades de la costa atlántica en esas semanas, este año decidimos con la familia venir para Colón y puedo asegurarte que no tienen nada que envidarles a los balnearios de mar, salvando la diferencia del mar con el río no” expresó Carlos, oriundo del partido bonaerense de Avellaneda. Asimismo su esposa Clara, quien consultaba sobre excursiones hacia las islas del río, agregó “lo bueno de este lugar es que nuestros hijos puedan jugar tranquilos en la playa sin temor a que alguien le haga algo o se nos pierdan, si bien hay mucha gente, las personas se distribuyen por toda la playa y los chicos pueden jugar en el agua y la arena”. Una actividad que se vio revitalizada con la bajante de las aguas son las excursiones a los bancos de arena y a las islas argentinas que se encuentran tanto al sur como el norte de nuestro río, también los servicios de alquiler de canoas, kayak, y divertimientos acuáticos pudieron observar un incremento de usuarios sobre sus servicios. Asimismo en horas del mediodía y por la noche los prestadores de servicios gastronomicos trabajan con su capacidad totalmente colmada. Por último desde la Secretaría de Turismo se informa que respecto al pasado año el número de consultas sobre actividades para desarrollar, lugares para visitar y alojamientos para lo que resta de enero y todo febrero es sensiblemente superior.