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obre la pulseada que mantienen los productores con el Gobierno nacional, instó a buscar puntos de equilibrio entre los intereses de los exportadores y los de la población. Para los sectores productivos y la economía de Entre Ríos ha sido “un año positivo”, dijo el secretario de la Producción, Daniel Welschen, al hacer un balance de 2006. El funcionario basó su evaluación en los números macroeconómicos de la provincia: exportaciones, empleo y consumo de energía en la industria, entre otros, aunque admitió que esas cifras no significan que no haya “dificultades en algunos sectores”. Welschen, en primer lugar, destacó el incremento de las exportaciones para afirmar que la provincia “sigue creciendo”. “Históricamente Entre Ríos exportó por un valor de entre 520 millones y 540 millones de dólares; en 2004, fueron 700 millones; en 2005, 845 millones; y este año exportaremos por un valor cercano a los 950 millones de dólares”. A estos datos cuantitativos, Welschen sumó uno cualitativo: en 2003/04, el 65 % de las exportaciones entrerrianas era de materias primas, mientras en 2006 éstas llegarán al 50/52 %; el resto tiene algún tipo de valor agregado. EMPLEO Otro de los rubros analizados por Welschen para fundamentar sus afirmacioneses fue el nivel de ocupación. “El desempleo sigue cayendo en Concordia y Paraná, las ciudades en donde se realizan las mediciones”, enfatizó, “pero también en aquellas localidades en donde no se mide la desocupación, uno palpa, en el diálogo con intendentes y empresarios, que hay dificultades para conseguir mano de obra, de manera especial en la zona centro-sur y la costa del Uruguay”. El incremento del consumo de energía de los sectores industriales es otro dato clave, según el funcionario. “Hay un récord”, aseguró. “Generalmente, en los picos de crecimiento que tuvo la provincia, el consumo industrial de energía nunca aumentaba más del 4 ó 5 %, y ahora estamos entre el 8 y el 11 %, con casos extraordinarios, como el del parque industrial de Crespo, que ha crecido el 40 %”, subrayó. Como indicador favorable, además, el secretario de la Producción destacó que en Entre Ríos “ha bajado” el número de beneficiarios de planes sociales. “En diciembre de 2003 teníamos más de 60 mil planes Jefes y Jefas de Hogar y hoy estamos en 39.000, pero más del 60 % de esos beneficios los reciben mujeres con más de tres hijos, a quienes les cuesta más” incorporarse al mundo laboral. LA AVICULTURA La actividad que más se ha desarrollado en los últimos años en la provincia es la avicultura, que ha traccionado a la economía entrerriana y se encuentra entre las que más valor agrega. “Entre Ríos —recordó Welschen— produce el 50 % de los pollos del país y exporta más del 65 % del total nacional. La avicultura era la cuarta o quinta actividad económica de Entre Ríos y hoy está en segundo lugar”, sólo superada por el conjunto de los cultivos agrícolas. “Esto es bueno porque la avicultura es grano transformado en carne y porque ya no es sólo de consumo interno sino que también se apunta a la exportación. Este año se venderán desde Entre Ríos al exterior unas 120 mil toneladas de productos avícolas”, valoró. El funcionario, en otro orden, desmintió que la agricultura haya desplazado a la ganadería y para eso se valió de los datos de la Fundación de Lucha contra la Fiebre Aftosa (Fucofa) cuyas estadísticas indican que en la segunda campaña de vacunación se inocularon más de 5 millones de cabezas contra los 4.800.000 de la campaña anterior. “Eso significa que sigue habiendo una recomposición del stock y un mejoramiento de la ganadería”, analizó. La lechería, asimismo, “pese a las dificultades de rentabilidad, también siguió creciendo y este año la producción subirá entre el 7 y el 8 %”, destacó. Welschen, finalmente, habló de “un año positivo” para el arroz, “con muy buenos rendimientos y una recomposición de precios”, y de la “buena actividad en el sector foresto-industrial”. “Gran parte de la madera que se produce en Entre Ríos y Corrientes es procesada en nuestra provincia” y los aserraderos “apuntan a hacer una madera de mayor calidad para darle más valor agregado”. Daniel Welschen señaló que en el Gobierno provincial “no compartimos el criterio de las entidades agropecuarias de que no hay rentabilidad” en el sector. De ser así, razonó, “no habría crecimiento”. Para el funcionario, en cambio, hay un “desfase” entre “una economía como la argentina, con salarios de 400/500 dólares en promedio, y la economía internacional con sueldos promedio de 3.000/4.000 dólares”. Ante esta realidad, Welschen instó a “buscar el punto de equilibrio” entre los intereses de los exportadores y los de la población. “Ahí es donde aún no se ha logrado una mesa de concertación para discutir el tema y encontrar el equilibrio en los productos más sensibles: la carne, la leche, el trigo y el maíz”, opinó. El secretario, en otro orden, defendió el accionar de la administración Busti en favor de los productores ante las políticas del Gobierno nacional que los afectan. “El Gobierno de Entre Ríos siempre ha buscado los mecanismos para acercar a las partes porque creemos que no hay verdades absolutas, y que hay puntos de encuentro que tarde o temprano se van a tener que dar. Nosotros, como provincia, llevamos al Gobierno nacional los planteos y tratamos de ayudar a que se destraben los conflictos porque en la pelea verbal perdemos todos”. “En este camino vamos a seguir trabajando”, enfatizó, pero advirtió que el Gobierno nacional tiene “la responsabilidad de controlar los precios internos porque no tenemos una economía internacionalizada”. Exhortó, por eso, a hacer un análisis “no sólo en lo sectorial sino también en el contexto económico y social de los argentinos”. (El Diario)