E
n un golpe audaz y con características express, un delincuente armado se llevó 2.000 pesos de un maxikiosco, ubicado en pleno microcentro de Paraná. El ladrón actuó con rapidez y en menos de tres minutos, sin disparar un solo tiro, concretó el atraco. Todo transcurrió con tanta velocidad que ninguno de los policías que estaban en la esquina pudo divisar la huida del asaltante. Sin embargo, a los pocos minutos una de las empleadas del local avisó a uno de los efectivos que está de custodia permanente en Peatonal San Martín y Alem. Tras una corta persecución, el uniformado logró arrestar al ladrón en calle 9 de Julio y Gualeguaychú, pero ya no llevaba la plata ni el arma utilizada. El hecho provocó una enorme indignación entre los comerciantes, sobre todo porque en la esquina hay custodia policial permanente. Según fuentes policiales el atraco ocurrió cerca de las 21 del lunes cuando un muchacho, de 20 años, apuntando con un revólver ingresó al kiosco y tras reducir a una de las empleadas, la llevó al depósito donde se encontraba otra de las encargadas. Allí les sustrajo alrededor de 2.000 pesos, dándose a la fuga por calle Gualeguaychú, pero fue detenido a las pocas cuadras. El malviviente fue trasladado a la comisaría segunda y por disposición del juez de Instrucción Gustavo Maldonado fue indagado en libertad.