A
nte esta situación, un concejal anunció que podría interponer un amparo ambiental. Un fuerte olor nauseabundo invade la zona del lago en Federación. La costa está plagada de algas, que cubren toda la zona del puerto y el arroyo Las Garzas y La Virgen. Ante esta situación, el concejal radical Gerardo Paoli, anunció que está estudiando interponer un amparo ambiental para que se inicie cuanto antes una limpieza y saneamiento, ya que tal como está, se contamina el medio ambiente. En los próximos días se iniciarán las obras de espigones, lo que reavivó la discusión y preocupación en la ciudad. Los malos olores se generan por el estancamiento del agua, como sucede en el puerto y algunos arroyos. De acuerdo a lo informado por los medios periodísticos de Federación, los pobladores temen que con los nuevos espigones la situación se agrave: tipo de obras “cierra” el curso del agua y de acuerdo a los anuncios, se van a construir más de 400 metros. “No queremos que el Municipio tenga que poner banderas negras de prohibido bañarse durante la temporada estival”, dijo el edil, al confesar que estudia interponer un amparo ambiental para evitar contaminación y perjuicios en el medio ambiente. En su pedido, el concejal pidió al Municipio que se cumpla, además, con la eliminación del basural, que está ubicado en la vieja ciudad de Federación, para lo cual se deberá construir una planta de tratamiento. Asimismo, dijo que se debe sanear el arroyo Las Garzas, tal cual lo exige el informe de impacto ambiental. El edil estima que los malos olores serían la consecuencia de una perjudicial contaminación, y para determinarlo ha iniciado una ronda de consultas con profesionales y autoridades de Prefectura Naval y una vez que obtenga los elementos necesarios, podría recurrir a la Justicia. “No hay intencionalidad política con esta investigación”, confesó a El Federaense, sino que su objetivo es evitar que haya una contaminación ambiental. La preocupación del concejal está dada por los fuertes olores, que no sólo molestan en la zona del puerto, “también en la zona del ex camping El Biguá”. Los malos olores se producirían también por las descargas de la planta de tratamiento de residuos cloacales. “Este es un problema que viene desde hace un buen tiempo, producto del crecimiento poblacional de la ciudad y de alguna situación operativa en la planta”, reconoció el concejal. No obstante, consideró que la problemática se ha agravado en el último tiempo. “Los olores, la vegetación y el color del agua en el camping viejo no es normal”, dijo y aclaró que por ese motivo se está analizando la situación para determinar “si se está vertiendo el líquido con los niveles adecuados de tratamiento”. Con la intención de contar con todos los elementos de prueba, el concejal confesó que trabaja con el ambientalista Jorge Sosa, con quien extrajeron muestras de agua en sectores de la costa para que sean sometidas a análisis de laboratorio y determinar así si están o no contaminadas. La urgencia de las pruebas se debe a la proximidad de la temporada de verano y los federaenses y turistas utilizarán las playas. Si bien los espigones impiden la erosión de la costa, su presencia genera —según destacan pobladores— que el agua quede estancada. A esto se le suma que el lago tiene poco caudal de agua. Paoli opinó que la construcción de los espigones, obra cuya ejecución está a punto de concretarse, modificará el comportamiento de las aguas en la costa, ya que se busca mitigar los efectos erosivos del oleaje. En este punto, el edil recordó las exigencias del informe ambiental, por el cual la obra se detuvo durante dos años, luego de que un grupo de vecinos se presentara en la Justicia solicitando garantías de que no se afectaría el ambiente, lo hicieron antes de la construcción de los espigones. Según se recordó, en esa presentación se planteaba la preocupación de los vecinos por la “eutroficación”, fenómeno que acumula algas en el lago, conocido vulgarmente como “verdín”, lo que provoca que el agua quede espesa y con un fuerte olor, que prolifera con las aguas estancadas y con las altas temperaturas. El informe de impacto ambiental, elaborado por la Universidad de Concepción del Uruguay, con supervisación de la Comisión Técnica Mixta (CTM, advirtió que “debía venir de la mano de cuatro trabajos paralelos: mejoramiento de la planta de tratamiento, erradicación del basurero a cielo abierto en la vieja ciudad, saneamiento del arroyo Las Garzas y el vertido del agua termal en el lago”. Además, de esas recomendaciones, el concejal radical solicitó al Municipio que elabore un plan para evitar la contaminación. “No queremos el día de mañana una ciudad que, fundamentalmente atrae al turista por la belleza y por lo limpia, sea un gran foco de contaminación”. (Fuente: El Diario)