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abitantes de Colón y Paysandú vieron alterada su noche del jueves por fuertes estruendos. Innumerables hipótesis se manejaron sobre las causas del acontecimiento; se habló de una lluvia de meteoritos, de aviones rompiendo la barrera del sonido y hasta de un experimento con gases de un vecino de Paysandú, pero finalmente se confirmó que todo se originó por explosiones controladas efectuadas por personal militar argentino en el límite de los departamentos Uruguay y Colón. Argentinos y orientales de la zona se estremecieron por dos detonaciones de gran magnitud que sacudieron ventanas y –en algunos casos, según lo indicaron vecinos de Uruguay– provocaron daños en vidrios, hechos que no fueron constatados oficialmente. UNO dialogó con fuentes militares que –si bien no brindaron detalles– indicaron que durante la noche del jueves (madrugada del viernes para el huso horario uruguayo) se realizaron maniobras en los campos de San Joaquín de Miraflores, próximo a Paso Urquiza, a unos pocos kilómetros de la costa del río Uruguay, en terrenos del Ejército ubicados al norte de Concepción del Uruguay. Durante la maniobras se realizaron detonaciones controladas de distintos explosivos y esto sería lo que aconteció. Esta actividad militar –como ocurre habitualmente cada año– ya estaba programada desde la semana pasada y así se informó días pasados en las páginas de UNO en La Histórica. Las autoridades del Batallón de Ingenieros Blindado II, con asiento en Concepción del Uruguay, habían adelantado que sus efectivos participarían de una práctica de tiro entre el lunes y el viernes. Se presume que tal vez lo avanzado de la hora y el fuerte viento reinante durante la noche pudieron provocar que alguna onda expansiva afectara poblaciones ubicadas al norte de San Joaquín, lo que seguramente llevará a explicaciones de jefes militares. Desconcierto La primera explosión se escuchó a las 23.05 y la segunda a las 23.14 (hora argentina) y durante gran parte de la jornada de ayer reinó el desconcierto sobre cuáles habían sido las causas del hecho. Tal era la incertidumbre que el intendente de Colón, Hugo Marsó, manifestó desconocer los ejercicios militares. Pasadas las 17 de ayer, la información que poseía Marsó era que “el Ejército de Concepción del Uruguay y de Paysandú dijeron que no están haciendo pruebas”, según indicó a UNO. “La Policía y Gendarmería intentaron averiguar, pero no hay respuestas”, agregó. “Vibraron las ventanas. Gente que estaba afuera escuchó como un trueno, más parecido a una explosión, como que la tierra se movió”, relató el intendente. La primera información sobre los estruendos la publicó el diario El Telégrafo de Paysandú, que dio cuenta de que esto generó “conmoción en la población, Policía, Bomberos y Prefectura”. Las detonaciones fueron escuchadas desde sitios distantes entre sí y uno de ellos fue el puente General Artigas, que une esta localidad con Colón. La prensa oriental informó que ocasionó temblores de paredes y hasta roturas de vidrios, y que los servicios de emergencia fueron desbordados por llamados que alertaban de lo ocurrido, en tanto numerosas personas se lanzaban a la calle a comentar lo sucedido. Hipótesis de todo tipo En Paysandú, 10 minutos después de la última explosión, una mujer se presentó en la seccional segunda de Policía para denunciar que un vecino suyo había efectuado un experimento químico con un potente gas y que había ocasionado una explosión, indicando que no era la primera vez que ocurría. En consecuencia, personal de distintas dependencias se trasladó al lugar indicado por la denunciante, pero tras una inspección se descartó que las explosiones se hubieran originado allí. Entonces se comenzó a especular con un sismo, un avión rompiendo la barrera del sonido o una explosión subterránea. Otros interpretaron que los estruendos podrían relacionarse con la anunciada lluvia de meteoritos y la caída de fragmentos del cometa Halley que se vaporizan al entrar en contacto con la atmósfera. Desde el aeropuerto de la ciudad uruguaya aseguraron que difícilmente podía tratarse de un avión que rompiera la barrera del sonido, aunque señalaron la posibilidad de que haya sido un fenómeno meteorológico. En ese sentido, distintas versiones indicaban que vecinos de Villa Quebracho, cerca de Paysandú, habrían visto algo similar a una estrella fugaz. (UNO)