E
l Foro Ecologista de Ramírez volvió a reclamar a las autoridades provinciales la urgente intervención para controlar a los establecimientos de engorde a corral, conocidos como feed-lots, que funcionan en los centros urbanos. Desde la ONG, que funciona en la ex estación de ferrocarril, se manifestó que reciben quejas y denuncias de los vecinos afectados por la contaminación que provocan los emprendimientos ganaderos dentro del ejido municipal. “Estos ciudadanos están preocupados porque los establecimientos generan gran cantidad de moscas y olores nauseabundos que se agravarán con la llegada del verano haciendo insoportable la vida cotidiana”, aseguraron. La contaminación se debe a que el sistema de engorde a corral genera grandes cantidades diarias de residuos orgánicos que son grandes consumidores de oxígeno y aportan nitrógeno y fósforos, además de patógenos que vinculados con los cursos de agua naturales o napas producen enfermedades en las personas. En diversos medios pidieron al gobernador Jorge Busti que agilice los trámites para que la provincia cuente con una ley que regule la actividad, siguiendo como ejemplo medidas tomadas en otras provincias, que establecen entre otras cosas que los feed-lots deben estar a menos de cinco kilómetros de la zona urbanizada y a dos de cursos de aguas naturales. “Tenemos conocimiento de que hay en la Legislatura un proyecto de ley para regular estos emprendimientos”, expresaron, para agregar que “este problema afecta no sólo a Ramírez, sino a varias localidades de la provincia, algunas de las cuales ya se han expresado, como Colonia Nueva y La Picada”. Asimismo indicaron que el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) delineó un manual de práctica para estos emprendimientos que, entre otros puntos, hace referencia a la elección del sitio, evaluación del impacto ambiental, pautas de diseño, uso de efluentes y estiércol y para la habilitación y control. “El sector público debería generar la legislación correspondiente para el control de una buena gestión ambiental”, se expresa. También se propone una clasificación en tres categorías según su capacidad: hasta 1.000 animales, entre 1.000 y 5.000 y más de 5.000. (UNO)