E
ntre los argumentos expuso que “el escenario que presenta el país para la empresa cárnica es adverso”. No obstante, aclaró que si las condiciones cambiaran en un futuro, “mantendría el interés en realizar la inversión”. Matievich responsabilizó al desfavorable contexto macroeconómico ganadero y a la veda en las exportaciones de las carnes. Asimismo explicó que “pese a la inversión millonaria que debía hacer, por su ubicación geográfica y el puerto con el que cuenta, la planta no deja de ser un lugar atractivo para invertir”. Expresó, sin embargo, que “la constante intervención del gobierno nacional en la actividad agroindustrial, hace que la actividad carezca de reglas claras”. Las declaraciones fueron hechas en una conferencia de prensa realizada esta semana en Gualeguaychú, a la que asistieron, además, el asesor Víctor Tonelli y Guillermo Martínez, pro secretario de la Cámara de Senadores de la Provincia y coordinador del proyecto de reactivación de la planta. Por su parte, Martínez informó sobre las gestiones llevadas adelante por el gobierno entrerriano desde mediados del año pasado con el objetivo de preservar el patrimonio histórico y cultural de la ciudad; sobre la base de un reclamo de la comunidad de Gualeguaychú, sin descartar ningún proyecto. Indicó que luego de la adquisición de la planta, el 7 de junio de 2005 por 1,6 millones de pesos, se realizó una evaluación de la factibilidad técnica y financiera de una hipotética reactivación y su potencial inversión. El análisis se realizó con la ayuda de técnicos del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) y de la Subsecretaría de Asuntos Agrarios y Recursos Naturales de la Provincia. A mediados de agosto se propiciaron las visitas guiadas a la planta y el 10 de setiembre, se realizó la primera asamblea ciudadana, que deliberó y planteó la necesidad de reactivar el frigorífico como tal.