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os gremios de empleados de las estaciones de servicio pararán el viernes 13 en reclamo de que la falta de combustible ha provocado ya suspensiones y despidos de personal. Los empresarios lo harán por la falta de respuesta del Gobierno respecto a medidas que apunten a recomponer la rentabilidad del sector. La medida de fuerza será la tercera que impulse Cámara de Expendedores de Combustible de Argentina en lo que va del año. Según informó Desiderio Varisco, secretario general del sindicato de empleados de estaciones de servicio de Entre Ríos, los empresarios en un primer momento iban a realizar una medida de fuerza separada de los trabajadores, pero “ahora se unieron a la nuestra porque todos estamos pasando por un mal momento”, dijo y adelantó que hoy a las 10 se definirá a través de un plenario cuántas horas abarcará el paro. Esta vez estiman que podría ser de 72 horas, lo cual complicaría mucho los viajes en virtud del próximo feriado. Recomposición El sindicalista contó que el reclamo de los trabajadores se centra en un pedido de recomposición del 25%. Hoy un empleado cobra alrededor de 1.050 pesos. “Nos unimos al reclamo de los comerciantes por mayor rentabilidad porque sabemos que las empresas que venden menos de un millón litros por mes están perdiendo alrededor de 15.000 pesos mensuales”, dijo y agregó: “Les sacaron la venta del gasoil, se lo dan a las petroleras y éstas lo venden en el campo a 2,20 pesos el litro”. Por su parte las entidades que agrupan a las estaciones de servicio de todo el país declararon el estado de emergencia del sector. El paro previsto se fundamenta en un pedido de recomposición de los márgenes de rentabilidad. Como consecuencia del congelamiento de precios desde hace tres años y, como contrapartida, el aumento de costos operativos y mayores salarios, hacen inviable la continuidad de estas empresas. El titular de la Cámara de Expendedores de Combustibles de Entre Ríos, Osvaldo González, citó como ejemplo que dos años atrás, el sector tenía ganancias brutas similares a las actuales: “De cada 100 pesos, ganamos 10 pesos. Ese porcentual correspondía a 2003 y se mantiene aún hoy”, dijo. En ese sentido, consignó que durante estos años los costos e insumos sufrieron un notable aumento: los salarios se elevaron 87% y ahora se suma un nuevo pedido de aumento. “Un playero –empleado– en 2003 ganaba 450 pesos y hoy tiene un básico de 1.050 pesos”, acotó. Así, marcó que en los costos totales tiene un gran incidencia el personal, ya que se requiere de varios empleados. “Nuestra intención no es que haya un incremento de precios de los combustibles; pedimos que se revea el margen de rentabilidad a través de establecer subsidios como el vigente para el transporte o reducir impuestos y de ese modo modificar el porcentual de utilidad”. González recordó que en los últimos dos años cerraron aproximadamente 2.000 estaciones. “En la región basta observar las rutas o internarse en algunos pueblos para observar el cierre de estaciones”, indicó. (UNO)