La medida es en respuesta al planteo realizado por diferentes entidades locales “que manifiestan verse afectadas por la habilitación de locales comerciales en nuestra ciudad”, se lee en el texto del decreto, que no menciona el real motivo que originó el fuerte reclamo del Centro de Almaceneros de la Paraná: la instalación de locales de origen extranjero, presumiblemente chinos.Nada de eso dice la disposición, que suspende hasta mediados de abril la tramitación de habilitaciones en general para comercios e industrias que se dediquen al rubro alimenticio en la ciudad.
Durante ese tiempo, la Comuna estudiará “la normativa vigente relativa a la materia, a fin de establecer la conveniencia o no de su adecuación a la realidad económica social de nuestra ciudad”, consigna el artículo 2. Y en el punto 3 invita a participar de la evaluación de la cuestión planteada a las instituciones y entidades involucradas o que nuclean a los comerciantes de la ciudad de Paraná, organismos provinciales y nacionales.
