
El presidente Javier Milei se refirió a la posibilidad de postularse para la reelección en 2027. En respuesta a una consulta sobre su continuidad en el cargo, el mandatario afirmó: “Si los argentinos deciden que debo seguir un período más, lo voy a hacer”.
Sin embargo, Milei aclaró que están estableciendo una estructura que asegure la permanencia del liberalismo en el poder “más allá de Milei”.
“Cuando finalice mi mandato, sean 4 u 8 años, me iré al campo a vivir con mis perros, me dedicaré a dar conferencias, y no me volverán a ver”, anticipó en una entrevista con la periodista Mariana Brey en Telefe.
En este contexto, el Presidente expresó su deseo de dejar a su sucesor una Argentina en crecimiento y con una cantidad significativamente menor de pobres.
Milei volvió a subrayar las diferencias con su vice, Victoria Villarruel, de quien se distanció poco después de asumir el cargo. “Ella es nacionalista católica y no se siente muy cómoda con las ideas de la libertad, por eso se produjo el distanciamiento; dejó de participar en las reuniones de gabinete en mayo del año pasado”, recordó.
En la misma entrevista, abordó la controversia en torno a la Ficha Limpia.
La relación con el papa Francisco
Una vez más, el presidente Milei comentó sobre su relación con el fallecido papa Francisco. Reconoció que su percepción inicial cambió tras conocerlo personalmente y realizar un viaje al Vaticano.
“Sé que suena tonto, pero siendo anarcocapitalista, no tenía bien internalizadas las cuestiones estatales. Me toca liderar un país con más de 46 millones de personas, y eso me permitió entender la magnitud del liderazgo de Francisco, quien guiaba a 2 mil millones de seres humanos”, introdujo.
Milei recordó que tuvo la oportunidad de disculparse personalmente con Francisco, luego de haberlo llamado “el maligno en la tierra” durante su campaña presidencial. Mencionó que mantuvieron un diálogo regular, a raíz de un pedido de su Santidad para cuidar a los pobres.
“Estoy convencido de que cumplí, porque sacamos a 10 millones de personas de la pobreza y seguiremos trabajando para sacar más”, afirmó.
Además, señaló que aprendió que Francisco era, en efecto, tres papas distintos. “Él no adhería a la teoría de la liberación; apoyaba la teoría del pueblo, que sostiene que los vulnerables solo tienen esperanza. Les decía lo que necesitaban escuchar. Esto ayuda a entender por qué recibía a ciertas personas que, en apariencia, no eran adecuadas”, explicó.
La frase hace referencia a líderes sociales y peronistas en conflicto con Milei, quienes eran frecuentemente recibidos en el Vaticano y fotografiados, imágenes que luego se distribuyeron en Argentina con fines políticos.
“Un segundo aspecto relevante es que los papas se expresan a través de sus encíclicas, y él hizo énfasis en la parábola del buen samaritano. A él no le preocupaba quién los había hecho sufrir, sino cómo ayudarles a levantarse”, continuó el jefe de Estado.
Y concluyó: “Por último, la tercera clave es su manejo de las finanzas del Vaticano; allí fue contundente, implementó un ajuste significativo y ordenó las cuentas”.