Un amplio operativo de seguridad sacudió nuevamente este jueves el área metropolitana de Río de Janeiro. Cerca de mil agentes, entre efectivos de la Policía Militarizada y de la Policía Civil, irrumpieron en el Complejo do Salgueiro, un vasto conjunto de favelas de São Gonçalo, para cumplir órdenes de captura contra integrantes del Comando Vermelho, el histórico grupo criminal nacido en las cárceles cariocas.
El operativo arrancó de madrugada y, según la Secretaría de Seguridad Pública, los equipos fueron recibidos con disparos en distintos sectores del complejo. Pese a los varios intercambios de fuego, hasta el mediodía no se habían confirmado víctimas ni detenciones.
Una operación marcada por antecedentes letales
La acción integra la segunda fase de la Operación Contención, la misma estrategia que a fines de octubre dejó 122 muertos, entre ellos cinco policías, en intervenciones en los complejos de Penha y Alemão. Fue la operación policial más letal registrada en la historia reciente de Brasil y provocó reclamos de organismos de derechos humanos.
Esta nueva etapa apunta principalmente a ejecutar 44 órdenes de arresto contra miembros del Comando Vermelho y a intervenir zonas consideradas estratégicas para la facción criminal.
Entre los buscados se encuentra Antonio Ilário Ferreira, alias Barricó, de 61 años, señalado como uno de los máximos jefes armados del grupo en São Gonçalo. Ferreira había sido condenado a 27 años de prisión, pero obtuvo un beneficio judicial en 2019 y desde entonces permanece prófugo.
Helicópteros, blindados y barricadas incendiadas
Para acceder a las zonas más densas del territorio, la Policía desplegó 20 vehículos blindados y dos helicópteros de apoyo aéreo. Uno de los principales obstáculos fue la remoción de las barricadas levantadas por los narcotraficantes, algunas de ellas incendiadas para bloquear la entrada de los agentes.
A pesar de la resistencia inicial, los operativos continuarán durante la jornada, con patrullajes y allanamientos en distintos puntos del complejo.
LB / EM
