La Cámara de Casación de Entre Ríos dispuso este martes la
prisión efectiva para el exgobernador de esa provincia y exembajador ante
Israel, Sergio Urribarri, en relación a la condena de ochos años de cárcel que
recibió en 2022 por distintos hechos de corrupción.
Los camaristas Marcela Davite, Marcela Badano y María
Evangelina Bruzzo dieron lugar al pedido de cumplimiento efectivo de la
sentencia, que habían solicitado los fiscales Gonzalo Badano, Patricia Yedro y
Francisco Ramírez Montrull. También se aplicó la misma medida para Juan Pablo
Aguilera, cuñado del exmandatario entrerriano.
La decisión de los jueces se fundamentó particularmente en
el riesgo serio de fuga, luego de que el dirigente kirchnerista fuera condenado
hace dos años a prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos,
por los delitos de "peculado" y "negociaciones incompatibles con
la función pública".
En 2020, Urribarri había sido nombrado embajador en Israel
por el gobierno de Alberto Fernández, gracias a su alianza con la entonces
vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner. Luego del fallo judicial en
primera instancia del Tribunal de Juicios y Apelaciones entrerriano, debió
renunciar e iba a ser reemplazdo por Cristina Caamaño, quien finalmente rechazó
la designación.
El Tribunal también condenó a Aguilera, dueño de una
imprenta, a seis años y medio de prisión y al exministro Cultura y Comunicación
entrerriano Pedro Báez, a seis años de prisión. Otro de los exfuncionarios de
Urribarri, Hugo Marsó, que se desempeñó como ministro de Turismo, fue absuelto.
En ese sentido, la Justicia sostiene que se probó que el
exgobernador de Entre Ríos usó de forma ilegal fondos públicos para, en algunos
casos, financiar sus campañas electorales, mediante contratos de imprenta y
publicidad, entre otras maniobras.
También se juzgaron hechos probados sobre un esquema de
retornos en distintas operaciones financiada por el Estado provincial, o las
contrataciones por 28,4 millones de pesos para la organización del encuentro de
presidentes del Mercosur, que se llevó a cabo en Paraná, capital provincial, en
2014.
Para los representantes del ministerio Público quedaron
comprobadas "las facilidades que tienen los imputados para abandonar el
país o permanecer ocultos: se trata de personas con recursos económicos, que
además se encuentran íntimamente vinculados a personas que pueden ayudarlos
económicamente, que tienen capacidad para trasladarse de un lugar a otro y
vínculos en el extranjero”.
La orden de Casación provincial ya fue comunicada al jefe de
la Policía de Entre Ríos, que una vez que realice la detención de Urribarri
deberá “alojarlo” en la Unidad Penal 1 "Dr. Juan José O Connor".